El techo poblacional de Binissalem se reducirá de 12.000 a 8.000 personas si prospera el avance de la nueva normativa urbanística municipal aprobado en el último pleno del Ajuntament. Con esta medida, desde la Corporación se pretende «garantizar el nivel de vida del que actualmente disfrutan los habitantes de la localidad». En este sentido, el concejal de Urbanismo, Josep Pons, señaló que «hablar de techo poblacional es hablar de calidad de vida, ya que reducirlo hará que Binissalem no se convierta en un bloque de pisos».
El alcalde, Salvador Cànoves, destacó, por su parte, la necesidad de tener en cuenta los criterios medioambientales y de sostenibilidad de recursos del municipio a la hora de hacer previsiones poblacionales. «Superar determinados límites podría suponer que determinadas infraestructuras y servicios no dieran a basto», añadió. En los últimos años, el número de habitantes de Binissalem ha aumentado en un 20% y alcanza los 5.600 habitantes.
Desde la Sala, se es consciente de que para reducir en 4.000 personas el techo de población actual «será necesario trabajar duro en la redacción de las Normas Subsidiarias». De momento, una de las medidas previstas para delimitar la edificabilidad es que el numero de viviendas por solar pase a depender de los metros cuadrados del terreno. Para evitar el aumento de coste de la vivienda, el Ajuntament apostará por las construcciones de protección oficial.