«El president (Antich) y la Conselleria de Sanitat defendemos que el hospital de Inca debe estar financiado al 100% por el Insalud pero ya habíamos dicho que si hacía falta adelantar el dinero lo haríamos pese a no estar presupuestado y eso es lo que hemos hecho». Con estas palabras iniciaba la consellera de Sanitat i Consum, Aina Salom, una rueda de prensa convocada con carácter urgente para explicar que el Govern balear ha habilitado una partida de 250 millones de pesetas para que el Insalud, el alcalde de Inca y el PP no les puedan seguir acusando de no querer el hospital.
«Nosotros no vamos de farol. El dinero está consignado y le recordamos al alcalde de Inca y al partido que representa (el PP que es quien está al frente del Insalud) que ahora ya no tiene ninguna excusa para no empezar a licitar la obra». «Y que sea cuanto antes», enfatizó. Aina Salom dejó claro que el adelanto de esta partida económica no supone en modo alguno renunciar a que la financiación del hospital de Inca corra a cargo al 100% por el Insalud. «Hemos habilitado esta cantidad para que no nos puedan decir que lo hemos retrasado y puedo asegurar que el PSOE ganará las próximas elecciones generales y será Madrid quien pague el 100% del hospital».
La consellera de Sanitat insistió en que nunca han estado rotas las negociaciones sobre el protocolo sanitario que contempla la cofinanciación del hospital de Inca y dijo que éstas continuan. Salom también insistió en que el Govern siempre ha estado dispuesto a adelantar esta cantidad y si se ha hecho ahora y no antes ha sido por que no quiere que se les echen las culpas ahora, o más tarde, de su retraso. «La pelota está ya en el tejado del PP», indicó.
Salom negó que el adelanto de esta partida en estos momentos se deba al revuelo en los hospitales General y Joan March por incertidumbre de pase al Palma II, contemplado en el protocolo sanitario y que según el Insalud balear estaba roto por la negativa del Govern a aportar los 250 millones del hospital de Inca.
Ahora el Insalud y el Ajuntament d'Inca, ambos regidos por el PP, deberán solucionar los problemas del terreno y ponerse manos a la obra para iniciar la construcción del esperado centro sanitario.