El pleno del Ajuntament d'Inca aprobó la contratación de diversas
obras cuyo presupuesto total asciende a casi 300 millones de
pesetas.
De entre todas estas contrataciones destaca la rehabilitación del
claustro de Sant Domingo, en cuya fase de acabados se van a
invertir 195 millones de pesetas. Otra de las obras contratadas fue
la segunda fase del colector de la Gran Via d'en Colom, cuyo
presupuesto asciende a 59 millones de pesetas. También se adjudicó
el proyecto de remodelación de la calle Muntanera. Las obras
permitirán suprimir los hitos que se habían colocado en esta calle
con el fin de impedir el estacionamiento de vehículos. Además, se
acordó adjudicar la limpieza y el asfaltado de los caminos del Pou
del Rasquell, d'en Barona, del Rasquell y el Camí Vell de Llubí.
Pero el asfaltado del camino de acceso a Santa Margalida, finalmente no se contrató. Esta obra fue comenzada hace varios meses por una empresa a la que no se le había adjudicado la obra, según afirmó el concejal de Urbanismo, Tolo Seguí, «a causa de un malentendido entre la Conselleria de Foment», organismo que concedió una subvención de 15 millones para ejecutar la obra, y una determinada empresa, que ya ha ejecutado una tercera parte del asfaltado. Finalmente, para no contratar la obra, el concejal Seguí presentó una enmienda que declaraba que la oferta presentada por la empresa Matías Arrom, 12'3 millones, podría incurrir en presunta baja temeraria.