El diputado de Vox en el Congreso por Baleares, Jorge Campos, ha presentado este martes una denuncia contra Podemos Illes Balears y la ilustradora Lluïsa Febrer por el polémico cartel de la fiesta alternativa Sant SebastiàQ+. El escrito se dirige también contra el encargado de la dirección artística, Víctor Conejo. En su escrito al juez, el diputado pide que se suspenda la fiesta y se ordene la retirada del cartel como medida cautelarísima.
La denuncia la ha presentado Campos en un Juzgado de Palma, si bien el partido político, desde su sede en Madrid, también se persona como acusación popular. El escrito al juez considera que el cartel «vulnera la dignidad y la conciencia del sentido religioso católico, en una clara ofensa a los católicos y, en este caso, a la figura de San Sebastián». Así, entiende que los hechos pueden ser constitutivos de un delito contra los sentimientos religiosos, con multa de ocho a doce meses.
La denuncia de Campos se suma a la querella que anunció ayer la fundación Abogados Cristianos. Por su parte, la regidora de Podemos en el Ajuntament de Palma, Lucía Muñoz, se defendió argumentando que la vinculación del patrón de Palma al colectivo LGTBI tiene recorrido histórico: «No es una cosa que digamos nosotros». Muñoz precisó que no dieron «ninguna instrucción» concreta a la artista sobre lo que tenía que aparecer en el cartel.
Si yo me burlara de los terraplanistas o de quienes creen en las hadas, la denuncia no tendría demasiado recorrido porque la ciencia me avala. Pues con la religión, esa fantasía que inventaron los humanos para manipular a otros humanos, es similar y el peso de la prueba recae sobre quienes afirman que la fantasía es real. Encima se creen que ese dios omnipotente les necesita para defenderlo; menudos prepotentes.