Los partidos de izquierda en el Ajuntament de Palma han reclamado el cese inmediato de del regidor de Seguretat Ciutadana, Miquel Busquets, y el coordinador de Seguretat, Jaume Pla, después de que en la presentación de los presupuestos de esta área se conociera la eliminación de una partida para la atención de víctimas de violencia de género en la Policía Local.
El PSOE de Palma, acompañado de los representantes socialistas en el Consell de Mallorca y el Govern balear, ha denunciado que «es una decisión del alcalde dar la espalda a las víctimas de violencia de género. Es inaudito. Palma es la ciudad con la tasa más alta de todo el país con casos de violencia de género». El portavoz del grupo municipal de PSOE en el Ajuntament de Palma, Francisco Ducrós, aseguró que «ayer [por el jueves] se nos explicó en comisión la ausencia de atención a las víctimas en la Policía Local y que las denuncias no serían tramitadas. Es una vergüenza y transmite un mensaje alarmante».
Ante el edificio de Cort, Ducrós ha anunciado que «hemos presentado una petición para el cese del regidor de Seguretat, Miquel Busquets, y el coordinador de Seguretat, Jaume Pla. El alcalde Jaime Martínez no ha explicado porqué se ha eliminado la partida para la atención de las víctimas. Es inconcebible». El portavoz socialista ha señalado que el alcalde «o no sabía nada de esta situación o tenía planeado esto vista la presión e indignación de la sociedad y los partidos políticos, ha tenido que rectificar. Es un tema que tiene que ver con delitos muy graves». Ducrós señaló que «van a tener que enmendar sus propios presupuestos» para rectificar este recorte.
Por su parte, la diputada socialista Mercedes Garrido lanzó una pregunta la aire: «¿este es el pago para contar con el apoyo de Vox?». La concejala del PSOE Angélica Pastor, además, negó la afirmación del alcalde que señalaba que Palma era la única ciudad española que recogía y tramitaba las denuncias de víctimas de violencia de género: «No es verdad. El convenio viogen es igual para toda España pero todas las policías cogen denuncias».
El grupo municipal de Més también expresó su indignación por el recorte en el servicio. «Es un hecho gravísimo. Es un ataque directo a las víctimas de violencia de género. No se puede permitir su eliminación. Este recorte es violencia institucional». Por este motivo pidió la dimisión del equipo de seguridad ciudadana. «Mientras el PP promete más seguridad, deja indefensas a las víctimas», señaló la portavoz del grupo, Neus Truyol.
A su vez, la concejala de Podemos Lucía Muñoz quiso lanzar un mensaje de tranquilidad. «Las víctimas no se merecen este desasosiego en el mes de la lucha contra la violencia de género», dijo. «La eliminación de este servicio lanza un mensaje a las víctimas». Además, desdijo las aclaraciones del Consistorio al señalar que «Podemos ha hablado con la Delegación del Gobierno y la Policía Nacional y la Policía Local no están negociando un convenio para la atención de las víctimas». Muñoz insistió en que las víctimas pueden ser atendidas en los teléfonos 112 y 016, que atiende en 53 idiomas. La concejala pidió «una depuracuón de responsabilidades. La gente llama a la Policía Local porque es lo que conoce».