Tras las últimas 48 horas de nervios y tensión, al final este jueves se podrá cazar en el municipio de Palma. A las seis de la mañana un buen número de cazadores, se calcula que unos 400 en todo el municipio, podrán retomar la actividad después de ocho años de prohibición. El colectivo se mostró satisfecho aunque advirtieron de los estragos del cambio climático en las capturas.
Tras algún tropiezo, la burocracia se ha acelerado en los dos últimos días. Tras el pleno de la semana pasada, donde se aprobó la iniciativa de Vox, el alcalde de Palma, Jaime Martínez, firmó la autorización de dicha medida y se reenvió al Consell a última hora del día, aunque ya no quedaban funcionarios insulares para seguir con los trámites. Los cazadores mostraron su malestar porque ayer era festivo y, por lo tanto, no se podía actualizar la web con la nueva adhesión.
Tras horas de tensión, el martes a última hora del día el Consell autorizó la inclusión de Palma en el mapa de municipios acogidos en el plan comarcal de ordenación de los territorios cinegéticos de aprovechamiento común. Es decir: hoy jueves ya se puede cazar en Palma.
Mientras tanto, el Club Palma Caza y Tiro advirtió que el miércoles por la mañana «el Consell nos comunicó que sí se ha incluido Palma en el mapa de caza, por lo que podremos salir hoy [jueves] a las seis de la mañana». Las zonas a las que acudirán serán Na Burguesa y alrededores de las canteras.
Migración
Sin embargo, no todo son buenas noticias para los cazadores. El presidente del Club Palma Caza y Tiro, José Antonio Bonet, advirtió que «es el año más malo de la historia de la caza por culpa del cambio climático. Las aves no han emigrado al sur por las altas temperaturas en Rusia, Francia y Alemania, así que los cazadores mallorquines no han cazado tordos». El calentamiento global también ha afectado a la migración y la caza de palomas y becadas en la Isla.