Si la tasa aceptable de absentismo en una compañía cualquiera debería rozar el 5 %, en la Empresa Municipal de Transports (EMT) de Palma hay cerca de un 15 % de los empleados (generando problemas sobre todo entre mecánicos y conductores) de baja. Los hechos son públicos y notorios y así se desvelaron en el último pleno del Ajuntament de Palma. La horquilla de trabajadores inactivos es de entre 80 y 120, de una plantilla que sobrepasa los 800.
Según el regidor de Mobilitat, Antoni Deudero, más allá de los casos habituales de bajas por paternidad o de las médicas por enfermedad más comunes,ha tenido mucho que ver «la frustración en la planificación y el servicio que la gerencia anterior estaba prestando».
Los trabajadores no le quitan razón. Consultados dos miembros del comité de empresa, «los usuarios mismos de los autobuses se darán cuenta de cómo van los conductores», señala Alfonso Sánchez, delegado sindical de SITEIB. «Los horarios son insuficientes, había negativas incomprensibles a vacaciones o días debidos por la merma de la plantilla y esto genera frustración y estrés y sí, puede ser causa de baja», añade.
Ambos afectados explican que ya se han reunido desde la configuración, no sólo del nuevo gobierno municipal, también del reciente comité de empresa, y confían en un cambio de talante. Deudero asegura que la intención es realizar un informe de la situación laboral de la EMT de carácter bimensual que se iría presentando en los consejos de administración.
Los datos de absentismo se revelaron en este primer encuentro y ahora toca buscar soluciones para enmendarlo. El departamento de Mobilitat quiere trabajar en el nuevo convenio y abrirse a la comunicación directa y asidua con los trabajadores.
«Es la pescadilla que se muerde la cola. Los conductores que trabajan tienen mucha presión por los horarios y las frecuencias. Para arreglar esto se necesitan más conductores», explica Juan Antonio Salamanca, del sindicato mayoritario USO. «Cuando el público ve que el bus pasa cada media hora y no a los 20 minutos carga contra ellos y no aguantan la presión. Igual un 30 % de los que están de baja es por este motivo». Salamanca observa que para reducir las frecuencias será necesario más personal, además de «más coches trabajando».
mañana mismo voy al medico y de digo que "toy tresaooo" y de seguro me nada para el carrizo... y a mi jefe le diré que no aguanto mas la presion.... y de segro me da la "re-baja" por indisciplinado, ofensivo en el trato y baja deshonrosa... menos mal que al menos cobrare el paro...