El regidor de Urbanismo del Ajuntament de Palma, Óscar Fidalgo, ha anunciado que en el solar de la antigua prisión quieren levantar viviendas públicas y no la nueva residencia de estudiantes que hace pocos días seguía solicitando la Universitat de les Illes Balears (UIB).
El proyecto que el nuevo equipo de gobierno tiene pensado para esta zona de Palma pasa por «una nueva vía de acceso que debe ejecutar el Consell de Mallorca», ha explicado Fidalgo, y «la voluntad de hacer más vivienda pública porque creemos que es lo que más necesita la ciudad en un solar municipal en esta zona», ha añadido. La intención es realizarlo «de la forma más ágil y resolutiva y en el menor tiempo posible».
Si bien la infraestructura de la antigua cárcel de Palma, ubicada en la carretera de Sóller, está catalogada y reformulada como una zona de equipamiento abierta a los ciudadanos y no puede tirarse y levantarse de nuevo. Sí puede ser fruto de una renovación y cambio de usos.
El recinto, que pasó a manos municipales en 2013, está en desuso desde finales de los años 90. El anterior equipo de gobierno proyectó un centro cultural y una aclamada residencia de estudiantes universitarios pero no entra en los planes del nuevo ejecutivo. Fidalgo acusa a la anterior responsable de Urbanismo, Neus Truyol, de no tener ningún convenio firmado con la UIB, ni financiación específica para este proyecto. «Fueron años de anuncios de una infraestructura abandonada», ha declarado. «Era un proyecto imposible que ascendía a más de 20 millones de euros».
Respecto a una nueva ubicación para estudiantes de la UIB, «la residencia queda en nada, al menos en esta parte de Palma», ha zanjado.