El Ayuntamiento de Palma, a través del área de Modelo de Ciudad, Vivienda Digna y Sostenibilidad, ha aprobado e iniciado la campaña de inspecciones del censo de actividades. La regidora del área, Neus Truyol, ha explicado que la campaña quiere garantizar el cumplimiento de la normativa y garantizar la convivencia entre vecinos, negocios y actividades comerciales «especialmente en las zonas con más denuncias». Según ha recogido Cort en una nota de prensa, la edil ha detallado que la campaña se llevará a cabo entre marzo y abril y que las inspecciones se realizarán principalmente en Santa Catalina, la zona que acumula más denuncias en los últimos tres años (96).
En esta línea, Pere Garau acumula 78 expedientes; Son Armadams, 75; Bons Aires, 66; y s'Arenal, 61. En concreto, en Santa Catalina hay unos 100 locales sin título habilitante (TH), que serán los inspeccionados, de los 700 existentes. Con la realización del censo, han añadido, se ha detectado que alrededor de un 15 por ciento de las actividades no disponen de permiso. La ley de actividades requiere a los municipios velar y controlar que todas las actividades dispongan de TH para su ejercicio.
Las inspecciones se realizarán por parte de los técnicos municipales del departamento de Actividades y Seguridad de Establecimientos. Durante las inspecciones, han explicado, los agentes podrán pedir el correspondiente permiso y comprobar el cumplimiento de la normativa. Si no se muestra el permiso al inspector se dará un plazo de un mes para legalizar o adecuar la actividad. Si pasado este plazo se sigue sin legalizar la actividad, se puede decretar el cierre. Las sanciones por no disponer de TH van de 3.001 a 30.000 euros.
En principio, ha recordado Truyol, no se sancionará puesto que el objetivo es instar a la regularización de la actividad, a no ser que se encuentre alguna incidencia grave. La campaña, ha indicado la edil, pretende complementar el trabajo hecho en el censo municipal de actividades, verificar los establecimientos que no disponen de permiso e instar a su legalización. Según han recordado, el censo de actividades es un listado georreferenciado de las actividades existentes en el municipio que dividen la ciudad de Palma en diferentes zonas. Se han establecido diferentes categorías sobre la tipología de actividades existentes en locales de planta baja.
Las categorías establecidas son 16 y son, entre otros, locales religiosos, farmacias, hoteles, aparcamientos, comercios u oficinas bancarias. Según el Consistorio, el censo es una herramienta más para planificar mejor, garantizar el descanso de los vecinos y la convivencia, porque garantiza un mayor control de los bares y restaurantes que se encuentran en la ciudad. De este modo, se evitarán altas concentraciones de bares y restaurantes que en la historia reciente de Palma han acabado generando Zonas Acústicamente Contaminadas.