El pleno del Ajuntament de Palma ha aprobado una propuesta de Ciudadanos, por la cual todas las galeras tiradas por caballos serán eléctricas a partir de 2024. De esta manera, el Consistorio llevará a cabo todos los cambios oportunos para el cambio progresivo de todas las galeras de la ciudad hacia modalidades eléctricas y no de tracción animal. Además, se establecerá una línea de subvención para facilitar el proceso de sustitución de todos los vehículos de galeras por modalidades eléctricas, fijando como límite el año 2024. Por otro lado, está previsto que el pleno apruebe la prohibición de circular en caso de que haya alerta amarilla o roja por altas temperaturas por el bienestar del animal.
Durante el pleno han participado el partido animalista Progreso en Verde, mientras que en favor de los caleseros lo ha hecho la asociación La Calesa. Un momento tenso dentro del pleno, ya que Manuel Vargas, portavoz de los propietarios de las galeras, ha acusado a los concejales y al alcalde de Palma, José Hila, allí presentes, de ser «hipócritas, mentirosos, que crean racismo y nos insultan por la calle», mientras que advertía que «aquí en el pleno no hay nadie que sea gitano para defendernos. Todos ustedes son payos». Las acusaciones se llevaron la sonora protesta de los regidores y la advertencia del alcalde.
Mientras Progreso en Verde advertía que se estaban incrementando los casos de los caballos desplomados por el efecto del calor, el representante de los caleseros acusó a los partidos animalistas de espolear las críticas en las redes sociales, donde son acusados de maltrato animal. «Estamos viviendo una situación vergonzosa, los caballos están bien. Son solo caídas», insistió Vargas, que añadió que estaba en contra de las galeras eléctricas.
Por otro lado, Guillermo Amengual, de Progreso en Verde, aplaudió la aprobación de las galeras eléctricas aunque reclamó que no fuese solo una medida que se quedase en el cajón y se llevara a cabo de manera efectiva. «Pongan fechas. Los caballos no pueden esperar tanto tiempo, se están desplomando».
Amengual señaló que «estamos pidiendo información sobre la edad de los caballos, porque sabemos que sobrepasan la edad legal y luego tenemos imágenes de caballos desplomados». El enfrentamiento entre el sector de animalistas y caleseros se hizo patente durante el pleno, cuando Amengual advirtió que «hemos sido denunciados falsamente o insultados. Hay que acabar ya con la explotación de las galeras».
Por su parte, Nieves Martín, portavoz de SOS Voluntarios de Son Reus, advirtió que «se toman a pitorreo el sufrimiento de los animales. Es una práctica inexplicable que se permite en Palma».
A la hora de debatir el punto de las galeras eléctricas, Francesc Dalmau, regidor de Mobilitat Sostenible, señaló que este jueves «se ha llevado a cabo un acuerdo político con una reivindicación social».