Este viernes, los estudios creativos del barrio de es Fortí se abrieron de par en par para recibir visitantes, con motivo de la jornada Open Studio. Sa Fàbrica, el Centro de Formación Audiovisual (CEF) de Mallorca o Casa Planas concentraron un buen número de visitas. Precisamente, Casa Planas estrenó la muestra So vital, comisariada por Tonina Crespí y que se podrá visitar hasta el lunes, que reivindica el papel de la marjalera (la mujer que trabajaba en sa Marjal) a través de imágenes rescatadas del archivo de Josep Planas y Montanyà y sonidos del campo.
«Empecé en 2014 a llevar un registro de la memoria oral de las mujeres del campo de sa Pobla. Ahora, en So vital hay capas de sonido que van narrando lo que realmente pasó en aquella época», cuenta Crespí.
Y es que las imágenes turísticas e icónicas del archivo de Casa Planas muestran a una mujer agraria folclorizada, vestida de payesa recibiendo a turistas a pie de pista del aeropuerto o en los cruceros. Sus postales de los años 60 y 70 revelan una estampa idealizada de la mujer que trabajó en el campo. «Se distorsionó y se manipuló la imagen de Balears. Las postales eran el medio de comunicación al exterior».
Frente a este tópico, Tonina Crespí quiere mostrar con el proyecto So vital la verdadera imagen de la mujer agraria de sa Pobla «vestidas de trabajo. Su labor se invisibilizó y se desubicó del territorio donde el turismo fue demoledor».
En Casa Planas se muestran las últimas imágenes de las pobleras recolectando arroz en s'Albufera, que fue territorio agrícola de sa Pobla pero luego tuvieron que abandonar a la fuerza.
Crespí ha grabado los sonidos de cedazos para convertirlos en un instrumento dentro de una obra musical que homenajea a estas mujeres del campo. Para ensalzar sus conocimientos rurales, Crespí también propone una especie de perfil de Linkedin con los conocimientos incalculables de estas mujeres.