Las entidades que impulsan la campaña 'Pere Garau, molt mes que Nuredduna' han interpuesto un recurso administrativo de reposición contra el proyecto del Ayuntamiento de Palma para la peatonalización de Nuredduna.
Arca, Flipau amb Pere Garau y la Asociación de Comerciantes del Mercat de Pere Garau firman este recurso en que se detallan las infracciones en las que, a su juicio, incurre el proyecto de Cort y por las cuales «se ha de declarar nulo de pleno derecho».
En primer lugar consideran que el proyecto es nulo de pleno derecho «por la ausencia de memoria participativa y del proceso de participación ciudadana en la elaboración y la aprobación del mismo».
Así, las entidades consideran que el Consistorio «tiene la obligación de facilitar la participación ciudadana obligada por la Constitución, otras leyes de régimen Local de Baleares y el Reglamento Orgánico de Participación Ciudadana del Ayuntamiento».
Un segundo motivo de nulidad de pelo derecho que contempla el recurso se refiere a la infracción del trámite esencial de un informe de movilidad. Considera las entidades que el informe de movilidad previo al proyecto «resulta evidente y preceptivo porque es una actuación municipal que acepta al viario».
«Parece una obviedad -se indica- pero se ha de remarcar que el proyecto aprobado definitivamente obliga a un una serie de incidencias en la movilidad», como son el cierre longitudinal de la calle Nuredduna, el cierre del acceso a través del túnel, la alteración de la circulación y de los aparcamientos. También queda afectada la plaza García Orell, que configura un nudo de circulación rodada, las variaciones del transporte público y el acceso al mercado.
Por último, se indica que el proyecto de Cort «incumple de forma manifiesta otros puntos del Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) de Palma», como que éste establece itinerarios ciclistas por la ciudad y uno de ellos es el de Nuredduna, «algo que no se contempla en el proyecto».
El PMUS también dispone la necesidad de un estudio de detalle de aparcamiento en la zona y exige que se intervenga como mínimo en un kilómetro de vial, a razón de 200 metros por año.
Por todo ello, las entidades firmantes del recurso solicitan «la suspensión de la ejecución y de los efectos de la aprobación definitiva del proyecto de reurbanización de la calle Nuredduna». También «la suspensión de la tramitación del procedimiento de licitación de las obras de ejecución para evitar perjuicios innecesarios al presupuesto público».
Se insiste, por último, en la necesidad del "inicio de un proceso participativo establecido por el reglamento municipal para elaborar y aprobar el proyecto más adecuado para la ciudad que aporte soluciones y no genere problemas al barrio más poblado de Palma".