El proyecto de cementera de Son Güells ha recibido este jueves el informe desfavorable de la Comisión Balear de Medio Ambiente (CMAIB), tras detectar deficiencias en la evaluación ambiental del proyecto.
El informe de la comisión, ratificado este jueves, concluye que la planta de dosificación para la preparación de hormigón en Palma producirá impactos ambientales adversos «significativos».
Entre otros puntos, señala que una de las carencias del estudio de impacto ambiental es no haber evaluado los efectos de esta instalación en un entorno «que no es propiamente industrial, sino que predominan las viviendas».
Los técnicos han tenido en cuenta también que este entorno tiene una población sensible «considerable», con una residencia y centro de día para personas con discapacidad física o enfermedades neurodegenerativas a tan solo 75 metros del lugar donde se proyecta la hormigonera.
En este sentido, el documento recalca que las alegaciones «ponen de manifiesto la poca aceptación social» del proyecto. Residentes de la Residencia y Centro de Día Son Güells ya solicitaron en marzo al Ayuntamiento de Palma que impidiera la construcción de una cementera y «no autorice ningún tipo de actividad industrial contaminante» a menos de dos kilómetros de la residencia. Los vecinos se han movilizado también en las últimas semanas.
Por ello, el informe señala que «el Ayuntamiento de Palma deberá hacer una propuesta para que el órgano ambiental inicie el procedimiento de modificación de la declaración ambiental estratégica».