El TSJB no le pone pegas a que el Consell de Mallorca y otros ayuntamientos formen parte del séquito de la Festa de l'Estendard. La Sala de lo Contencioso ha rechazado un recurso presentado por el grupo municipal de Ciudadanos contra la decisión que adoptó el Ajuntament en 2017 de incluir a otras corporaciones. La Sala admite que existe un riesgo de «alterar el significado de la Festa» dado que la incorporación se produjo en el cambio de fecha de la Diada de Mallorca. Sin embargo, señala que: «La simple incorporación de otras autoridades al séquito, manteniendo el resto del ceremonial en sus elementos esenciales y sin restar protagonismo a la corporación municipal hace innecesaria la modificación de la declaración de Bien de Interés Cultura para el cambio impugnado».
Ciudadanos sostenía en su recurso que los cambios sí suponían una modificación sustancial en la Festa, que está declarada bien cultural inmaterial desde hace 13 años. «La personalidad de la ciudad y sus habitantes queda gravemente amputada al modificar la naturaleza fundamental de la fiesta: su carácter conmemorativo de la entrada de Jaume I en la hoy capital de la Isla y su carácter urbano», sostenía el recurso.
La sentencia considera que no hay colisión en la reserva de asientos a los alcaldes en la Seu y que esos cambios son mero protocolo. Así, lo único que entra a valorar a fondo es la incorporación de otras autoridades al séquito que va hacia la Seu y luego regresa a Cort: «No se puede negar que sí se produce una alteración, pero no alcanza la relevancia suficiente como para comportar una modificación de la celebración en términos que supongan vulneración de la protección otorgada». La sentencia también indica que la fiesta ha cambiado a lo largo de los siglos sin perder su esencia.
El coronavirus alterará el desarrollo habitual de la fiesta
El área de Cultura y Protocolo estudian cómo debe desarrollarse este año la Festa de l'Estendard para que se puedan cumplir las medidas sanitarias obligadas por la pandemia del coronavirus. Aunque aún no hay nada decidido, son aquellos momentos de la fiesta que congregan más público, como la representación de La Colcada o la entrega de las medallas de oro de la ciudad, los que más se verán afectados.