Pep Lluís Iglesias (Palma, 1962) es el presidente de la asociación Palma Viva, adherida a Pimeco, y que los comerciantes de los alrededores de la calle Unió han reactivado en las últimas semanas. Este jueves se unen al cierre patronal contra la política de movilidad de Cort.
¿Qué les ha motivado a reactivar la asociación?
— El cierre al tráfico de la calle Unió. Se anunció el 4 de diciembre y el día 9 se hizo efectivo, sin tener en cuenta para nada a los empresarios de la zona. Desde entonces hemos visto como el barrio ha ido muriendo. Apenas hay gente por las tardes y a partir de las 20:00 horas, cuando los comercios cerramos, la sensación es de abandono total.
¿Qué piden a Cort?
— Que lo reabran de nuevo al tráfico hasta que cuenten con un plan de remodelación del barrio con dotación presupuestaria para ejecutarlo.
¿Creen que la peatonalización es mala?
— No, en absoluto. Estamos a favor siempre que se cuente con una planificación. Reclamamos poder participar en esta toma de decisiones aportando nuestra visión del impacto que pueden suponer este tipo de medidas.
¿Por qué alternativas abogan?
— Más plazas de aparcamiento, cuantas más, mejor. Nuestra apuesta es la habilitación de párkings disuasorios, con vigilante de seguridad en buenas condiciones y con conexiones al centro de la ciudad cada cinco minutos. Los usaría todo el mundo.
¿Ven con buenos ojos un párking en la plaza Major?
— Creemos que puede ser positivo ganar plazas de párking en esta zona, así como en La Rambla y en Jaume III. De todos modos, en las galerías de la plaza Major se podría apostar por una fórmula mixta con aparcamientos y negocios con el fin de reactivar esta área.
¿Esta restricción de tráfico afecta más a la gente de Palma o de la Part Forana?
— A todo el mundo, pero de fuera de Palma ya no viene casi nadie. Es más fácil ir a una gran superficie de fuera de la ciudad.
¿Cuántas plazas de párking han quitado?
— Alrededor de 17.
¿Motivo suficiente para que un barrio muera?
— Lo que más ha afectado es que no se pueda ni acceder en coche. ¿Cómo lo hace ahora el cliente para poder cargar sus compras? Esperamos que el Ajuntament nos escuche.