El sindicato de la función pública CSIF lamenta que «últimamente en el Ajuntament de Palma encontramos a políticos que hacen funciones que no les corresponden», y que «quieren hacer de policías», criticando que «una concejala, que no es la responsable del área de Seguridad Ciudadana, quiere decidir sobre la organización interna y el funcionamiento del cuerpo».
En estos términos se refieren los representantes de los funcionarios sobre la crisis en el seno del pacto en Palma, después de las críticas de la regidora de Justícia Social, Sonia Vivas (Podemos) contra la edil de Seguretat Ciutadana, Joana Maria Adrover (PSOE), por la reincorporación a sus antiguos puestos de mandos de la Policía Local acusados en la presunta trama de corrupción del ‘caso Cursach'.
Sobre las palabras de Vivas, el CSIF afirma que cabe la duda de si su actuación tiene una motivación personal o rencor en contra de las decisiones que ha tomado la concejala, que sí tiene asignadas esas responsabilidades, y que confía en el jefe de policía para el ejercicio de sus funciones.
«En la pasada legislatura la concejala salía a patrullar (evidentemente sin ninguna formación ni conocimiento de las funciones propias de la profesión), ahora nos encontramos con que una concejala, que no es la responsable del área de Seguridad Ciudadana, quiere decidir sobre la organización interna y el funcionamiento del cuerpo».
Prosigue el sindicato indicando que «estamos seguros de que esta concejala no le gustaría que los responsables de otros áreas le dijeran lo que tiene que hacer o que le condicionaran sus actuaciones», y ratifica que el CSIF apoya completamente las actuaciones que están llevando a cabo los responsables del área de Seguridad Ciudadana.
Finalmente, apunta que «cada uno debe asumir su rol, que gobiernen, así como dejen a los técnicos policiales hacer lo que les corresponde», ya que los mandos que se han ido reincorporando a sus puestos al haberse levantado las medidas cautelares en su contra están «perfectamente capacitados para realizar sus funciones, guste o no al político».