Las playas de Can Pere Antoni y de Ciutat Jardí se han abierto este martes con bandera verde, según han confirmado fuentes del Ajuntament de Palma, tras el último cierre por vertidos de aguas mixtas producido este mismo lunes, como consecuencia de las lluvias.
Esta decisión se ha tomado tras obtener los resultados de las analíticas de las muestras de agua tomadas en el mismo día que se decidió cerrar estas zonas del litoral palmesano.
Los análisis muestran que «no hay riesgo sanitario ni presencia de contaminación y se permite el baño», informa el consistorio.
Se trata del segundo cierre en pocos días, tras el ordenado hace tan solo una semana, y que se prolongó dos días más.
Según el consistorio, son cierres por precaución, y recuerda que Emaya ya ha iniciado las actuaciones para la construcción del colector interceptor y el depósito situado junto a la depuradora, que reducirán hasta el 90 % los cierres de playas y la mayoría de los vertidos contaminantes en este sector de la bahía de Palma.