En la recta final de las restricciones por Semana Santa, que finalizan el 9 de abril, las comunidades han comenzado a actualizar sus medidas y, si bien algunas como Cataluña, Navarra o País Vasco han optado por endurecerlas, otras las relajan como es el caso de Asturias, que reabre hoteles y apartamentos turísticos.
A partir del próximo viernes, Cataluña volverá al confinamiento perimetral comarcal con carácter general, también para las burbujas de convivencia, a fin de evitar desplazamientos el fin de semana ante creciente presión hospitalaria por la covid, mientras que Navarra prorroga dos semanas -hasta el jueves 22 de abril- las restricciones de aforo y movilidad.
De esta manera, Cataluña da un paso atrás después de tres fines de semana seguidos en los que se permitía el desplazamiento libre dentro de la comunidad solo con la burbuja de convivencia. A partir del próximo viernes esto ya no será posible.
Por su parte, Navarra mantiene 14 días más el cierre del interior de la hostelería y de toda la actividad en zonas interiores de establecimientos como bingos, salones de juegos y recreativos; y el aforo comercial en medianas y grandes superficies al 30 % y en el 50 % en el pequeño comercio.
En el País Vasco, la provincia de Álava y su capital Vitoria están cerradas desde este miércoles al haber superado una incidencia de 400 casos acumulados en 14 días.
Así no se podrá entrar ni salir de Álava ni de otros 25 municipios, salvo por razones de trabajo, estudios y otros motivos recogidos como excepciones, y el interior de la hostelería permanecerá cerrado, salvo en las franjas horarias entre las 6:30 horas y las 9:30 horas y entre las 13:00 y las 16:30 horas.
Cantabria también prevé -aún no lo ha decretado- un nuevo cierre del interior de la hostelería y reducir los aforos de comercio, deporte, bodas, bautizos, comuniones y eventos culturales.
Por contra, el Gobierno de Asturias ha anunciado que retrasa una hora el toque de queda, hasta las 23:00 horas, flexibiliza las restricciones que actualmente se aplican en la hostería y permitirá la reapertura de hoteles y alojamientos turísticos a partir del sábado, 10 de abril.
Las restricciones en hostelería -cierre a las 20:00 horas, límite de cuatro personas por mesa, separación de dos metros, prohibición de consumir en barra y aforo limitado a la mitad-, «se van a precisar» desde la Consejería de Salud para adaptarlas a la nueva situación, en un momento en el que ha cambiado el ciclo horario y la climatología con la llegada de la primavera.
El Principado también baraja una posible ampliación de los horarios de bares y restaurantes, como mínimo, en las terrazas de los establecimientos hosteleros, aunque los cambios, en principio, no serán detallados hasta mañana.
También la Comunidad Valenciana se ha pronunciado hoy sobre la desescalada si bien la consellera de Sanidad, Ana Barceló, ha pedido que se mantenga la prudencia y «se vaya poco a poco».
La Generalitat prevé elaborar una propuesta sobre qué restricciones «se pueden aliviar más o menos» a partir de la semana próxima.
En Galicia, el consellero de Sanidad, Julio García, ha ratificado hoy que la prohibición de reuniones de no convivientes en los hogares termina el 9 de abril, por lo que el sábado se permitirán estos encuentros con un máximo de cuatro personas en interior y seis en exterior.
En Baleares, el Gobierno está analizando la situación para decidir sobre la modificación de algunas de las normas vigentes, aunque desde la consellería de Salud han pedido «mucha prudencia».
Ante una posible prórroga de las medidas, la patronal de pequeña y mediana empresa de Baleares (PIMEM-Restauració) ha expresado su rotundo rechazo a prolongar las medidas impuestas al sector por considerar que son fruto de posturas y decisiones «netamente políticas».