La líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, no se plantea ni su dimisión ni tampoco el cese de ningún otro responsable del partido por su hundimiento en las elecciones catalanas; «si esto solucionara el problema, estaríamos en otro escenario, pero la verdad es que no», ha dicho este lunes.
Después de dejarse 30 escaños en los comicios de este domingo y quedarse en seis, Arrimadas ha reconocido haber cometido «errores» en esta campaña, ha señalado en una entrevista en Onda Cero, «el principal, no haber sido el motor de sacar al constitucionalismo de la abstención».
«No hemos podido movilizar a nuestro electorado y es absolutamente responsabilidad nuestra que asumimos, pero vamos a seguir trabajando», ha asegurado.
Lo que no cree es que eso sea motivo para que alguien tenga que dimitir al argumentar que Cs es el partido que más ha asumido responsabilidades refiriéndose a las dimisiones, incluida la de Albert Rivera, que siguieron a la deblacle de las últimas elecciones generales.
«En la vida no todos son noches de fiesta electoral, hay veces que tienes un resultado mejor y las circunstancias acompañan y hay veces en las que las circunstancias no acompañan y aciertas menos, pero hay que seguir para alante con fuerza», ha justificado la líder naranja.
Los que militan en Cs, ha explicado, saben que no es un partido fácil, «es un partido que hace lo correcto, no lo fácil que da votos y hay veces que no consigues esos votos».
Ha insistido en justificar los pésimos resultados de ayer en la baja participación y en que su electorado es el que más se queda en casa, aunque ha admitido que no ha sido el único factor al recordar que Cs no viene del éxito electoral de las catalanas de 2017 sino del 10N, en el que la formación cayó hasta los 10 escaños.
«Si uno quiere hacer análisis honestos no puede tomar de punto de partida lo que pasó en 2017», ha añadido