El ministro de Sanidad, Salvador Illa, ha recalcado este miércoles que el Gobierno ha establecido el plazo de «dos o tres semanas» para evaluar las medidas impuestas contra el coronavirus antes de estudiar el confinamiento domiciliario como están pidiendo algunas Comunidades Autónomas.
«Hay margen para la toma de medidas adicionales», ha sostenido Illa en una rueda de prensa después de reunirse con todos los consejeros de Sanidad de los gobiernos autonómicos en el Consejo Interterritorial de Salud.
Los ejecutivos autonómicos de Asturias, Ceuta y Melilla ya pidieron al Gobierno adecuar el estado de alarma para que pudieran decretar un confinamiento domiciliario, solicitud a la que se han sumado este miércoles el País Vasco y Andalucía.
Ante esta petición, el Ejecutivo ha defendido las medidas que pueden tomar las autonomías dentro de este estado de alarma e insiste en esperar el plazo que dicen los científicos para poder valorar la eficacia de las restricciones impuestas.
«La conclusión que se ha sacado de la reunión, bajo mi punto de vista, es que hay una estrategia nacional, unos indicadores en base a ellos analizamos el riesgo epidemiológico, donde hay margen y hay que evaluar estas medidas y darse un tiempo de dos o tres semanas», ha sentenciado Illa.