Una grabación de una conversación informal de la ministra de Igualdad, Irene Montero, conocida este lunes dificulta nuevamente la explicación oficial que desde el principio ha mantenido el Gobierno en la cuestión del coronavirus. Se trata de un momento de charla informal de la número dos de Podemos antes de una entrevista.
Las cámaras y los micrófonos de la cadena pública vasca ETB están ya encendidos, esperando al directo, y Montero, con toda naturalidad, admite ante la periodista que si hubo menos gente en las manifestaciones feministas del 8M fue por el coronavirus: «pues tía, creo que [fue debido] al coronavirus. O sea, no lo voy a decir porque no lo voy a decir», y explica que quiere ser muy prudente.
Este fragmento ha propiciado una gran cantidad de comentarios y alusiones directas a Montero. No son pocas las voces que creen que de este modo ha quedado demostrado que el Gobierno sabía ya de la peligrosidad del coronavirus, y que por tanto la ministra de Igualdad, si no el ejecutivo al completo, debería dimitir.
No solo perfiles anónimos se han apuntado a esta campaña, sino también sus oponentes políticos como el PP de Madrid, el alcalde de Badalona, Xavier García Albiol, o el exdiputado nacional de Ciudadanos, Toni Cantó.
Este último ya ha ido más allá y ha aventurado que la propia ETB podría haber filtrado el vídeo como una suerte de «venganza del PNV por el pacto del Gobierno con Bildu».
En el mismo fragmento la ministra de Igualdad manifiesta que cree que se ya entonces se estaba haciendo una buena labor de comunicación desde el Gobierno con respecto a este asunto, basándose en los datos médicos.