El contagio múltiple de unas 60 personas que asistieron hace dos semanas a un funeral en Vitoria ha obligado a poner en cuarentena «manzanas completas» de un pequeño barrio de la localidad riojana de Haro, en el que hasta ahora es el principal foco de propagación del coronavirus conocido en España.
En una comparecencia en la que ha dado cuenta de los último datos registrados tras la reunión del Comité de Seguimiento registrados, el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, ha explicado que los afectados por este contagio son 38 residentes en las localidades riojanas de Haro y Casalarreina y al menos otros 25 que viven en la provincia de Álava.
Simón ha justificado estas medidas «difíciles» y «drásticas» en la necesidad de hacer seguimiento de un grupo de riesgo «grande» y que ha mantenido un «contacto muy estrecho». Además, ha destacado que los 39 casos notificados hasta ahora en La Rioja suponen un incidencia mayor a la que le corresponde a la región por su población.
A raíz del contagio se ha determinado el acceso controlado al centro de salud de Haro y un refuerzo del control del aislamiento domiciliario de los afectados, en colaboración con las fuerzas de seguridad, en concreto con patrullas de la Policía Local de Haro y de la Guardia Civil.
Además de haber comenzado a preparar las medidas necesarias para dotar a los afectados de los servicios que requieren e iniciar la cuarentena, la Dirección General de Salud Pública del Gobierno de La Rioja ha suspendido las actividades en espacios no deportivos cerrados (cines, teatro, etc.).
Las calles de Haro se han vaciado en pleno día, según han podido comprobar los medios que se han acercado a la zona.
De forma paralela, el sistema sanitario del País Vasco ha identificado «desde hace días» a las personas que asistieron al funeral en Vitoria, así como a todos sus contactos.
La consejera vasca de Salud, Nekane Murga, ha confirmado que algunos de los nuevos casos positivos contabilizados en las últimas horas en Álava corresponden a ciudadanos que asistieron al funeral, aunque «no una cifra elevada».
Este sábado el balance matinal del Ministerio de Sanidad ha elevado a 430 los positivos en el conjunto del territorio y a 8 los fallecidos, aunque posteriormente se han confirmado las muertes de dos nonagenarios en el País Vasco y Madrid. Y ha cifrado en al menos 30 los pacientes dados de alta tras contraer el virus.
De esos 430 casos confirmados por el ministerio, 174 se registraron en la Comunidad de Madrid, la región con más positivos por delante de País Vasco (45), La Rioja (39), Comunidad Valenciana (30), Andalucía (27), Cataluña (24), Canarias (18), Castilla-la Mancha (15), Castilla y León (14), Aragón (11), Cantabria (10), Baleares (6), Extremadura (6), Asturias (5), Galicia (3) y Navarra (3).
Las únicas zonas donde aún no se han detectado casos son Murcia y las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
Sanidad ha mantenido la fase de contención del dispositivo sanitario porque los casos en los que no se ha identificado el origen son «muy limitados» y se está «siendo perfectamente capaz de controlarlo», ha indicado Simón.
Respecto a los casos en los que había dudas del origen del contagio, ha apostillado que «se van resolviendo».
A las preguntas de los periodistas sobre la seguridad sanitaria en los actos reivindicativos de este domingo por el Día Internacional de la Mujer, Simón ha indicado que la convocatoria es para nacionales y por tanto no se espera una afluencia masiva de personas de zonas de riesgo.
No es una situación, ha explicado, comparable a la de la Maratón de Barcelona, suspendida y donde se esperaban participantes de zonas riesgo y cuya cancelación considera «lógica». «Si mi hijo me pregunta si puede ir, le voy a decir que haga lo que quiera», ha zanjado ante la cuestión insistente de si recomendaría a la gente acudir o no.
Este sábado ha trascendido el primer contagio de la COVID-19 en una prisión: se trata de una funcionaria del módulo de jardín de infancia de la prisión Madrid IV de Aranjuez, han indicado a Efe fuentes de Instituciones Penitenciarias, que precisan que desempeñaba su labor en dos módulos donde conviven 36 reclusas y sus hijos de hasta 3 años, que son 39 niños.