Tsunami Democràtic ha forzado este lunes varias marquesinas publicitarias, de tipo Objeto Publicitario Iluminado (Opi), en las calles de Barcelona para colocar carteles que anuncian la movilización del miércoles durante el partido en el Camp Nou entre el FC Barcelona y el Real Madrid, unos carteles que ya han sido retirados.
Fuentes municipales han informado que la publicidad no ha sido contratada y que, de momento, han detectado seis marquesinas ocupadas, de las que los carteles han sido retirados «de manera inmediata».
«Cuando el Ajuntament o la empresa concesionaria lo detecta, se cambia de manera inmediata por la publicidad contratada», han remarcado desde el Consistorio.
Los carteles colocados por Tsunami contienen el mensaje «18-D. Derechos. Libertad. ¡Autodeterminación!» y el lema 'Spain, sit and talk' junto a la convocatoria de la movilización en el campo azulgrana el miércoles a las 16 horas.
Fuentes de Clear Channel, la empresa que gestiona los soportes, han informado de que «se trata de una acción vandálica puntual» y que durante la noche del domingo a este lunes se ha forzado el cierre de los Opi para cambiar su contenido.
«En cuanto ha sido detectado, se han retirado los carteles fijados de manera irregular» y se ha restablecido la publicidad contratada, han indicado las mismas fuentes, que han detallado que los hechos son aislados y que la compañía está trabajando para tomar medidas técnicas que reduzcan el uso indebido de los soportes.
Durante el fin de semana, Tsunami también ha realizado acciones propagandísticas como una proyección en la Catedral de Girona con el lema «Cambiemos el estado de las cosas. No violencia. Desobediencia civil» y ha desplegado pancartas en ubicaciones como la Torre Salvana de Santa Coloma de Cervelló (Barcelona).
Tsunami Democràtic aseguró el viernes que nunca ha dicho que quiera bloquear o suspender el Clásico, sino que su objetivo es «hacer visible en el campo y en las gradas la situación de excepcionalidad que sufre Cataluña».
Unos 1.000 mossos d'Esquadra garantizarán la seguridad del entorno del Camp Nou, en un dispositivo de seguridad que en total contará con 3.000 efectivos incluyendo a la seguridad privada del club.
El comisario jefe de los Mossos, Eduard Sallent, indicó la semana pasada que el peor escenario sería una interrupción del partido pero puntualizó que «las informaciones que Tsunami ha trasladado es que no tiene intención de interrumpir el partido».
El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón, que instruye la causa sobre la presunta actividad terrorista de nueve miembros de los CDR, también investiga desde octubre a Tsunami Democràtic por supuesto delito de terrorismo, y su primera medida fue ordenar el cierre de sus páginas webs y perfiles en redes sociales.