El líder del PP, Pablo Casado, ha criticado este lunes que el jefe del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, envíe una carta al presidente catalán, Quim Torra, porque lo que «tendría que mandarle» es un requerimiento para cumplir la legalidad como paso previo a la aplicación del artículo 155 si es necesario.
En un desayuno informativo, ha mostrado además, su preocupación por que la Generalitat pueda aplicar el tercer grado a los condenados por el Tribunal Supremo por el procés y ha reclamado que si esto ocurre el Gobierno se plantee «trasladar a esos presos a otra cárcel» que esté bajo competencia estatal y no de Cataluña.
Para el líder de los populares se han producido «graves errores» en la coordinación y el dispositivo policial, como la falta de medios, por lo que ha insistido en la necesidad de aplicar de inmediato la Ley de Seguridad Nacional, para que Torra deje de estar al frente del dispositivo de seguridad en la comunidad autónoma.
Casado ha advertido de que en Cataluña ahora «no se necesita debilidad, apaciguamiento, ni apelación al diálogo» sino recuperar «la ley y el orden» frente a los independentistas porque la sensación de «noqueo y desconcierto» que cree que está transmitiendo el Gobierno es «muy preocupante».
Por eso, ha instado a Sánchez a que «si no ha cogido el teléfono a Torra se lo coja» pero para decirle que rompe con él todos los acuerdos institucionales que tiene con ERC y JxCAT porque «la moderación y la tranquilidad» no resuelven las cosas.
Por el contrario, hace falta un «Gobierno de verdad, que no le tiemblen las piernas si tiene que aplicar medidas que garanticen la ley y el orden», ha considerado.