El candidato del PSC, Miquel Iceta, ha asegurado que el exvicepresident Oriol Junqueras es «como el osito que todo el mundo quiso tener», por sus formas «cordiales» y ser una persona «muy agradable», y ha afeado por otro lado a la vicepresidenta del Gobierno por «alimentar el discurso» soberanista.
En declaraciones a Onda Cero, Iceta se ha referido a las palabras del candidato de ERC y exvicepresidente de la Generalitat, ahora en prisión preventiva sin fianza, que ha señalado hoy en una entrevista que fue a prisión porque no se esconde y porque es «consecuente con sus actos».
«Junqueras tiene un punto de razón, porque él se ha quedado y no ha salido disparado a otro lugar y ha hecho frente a las consecuencias de sus actos», ha admitido Iceta, que, al ser preguntado sobre por qué cala el discurso del líder de ERC, ha explicado que aprecia sus «formas cordiales» y «respetuosas».
«Él llegó a decir que 'junquerismo es amor'. Es una persona muy agradable en lo personal. Con perdón y que nadie se lo tome mal, es el osito que todo el mundo quiso tener. Tiene un mensaje inteligente de crecer desde el punto de vista independentista y de reconocer que no tienen mayoría suficiente y deben proyectarse más allá, evitando los brotes sectarios. Ahora, también es el mismo Junqueras que dijo que es una batalla del bien contra el mal, el extremo contrario».
Por otro lado, el líder del PSC ha criticado las declaraciones de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, acerca de que Mariano Rajoy y su aplicación del artículo 155 de la Constitución había «descabezado» a los partidos independentistas. «Se le ha ido la mano y no ha estado fina», ha opinado Iceta.
«Tengo gran afecto y respeto por Soraya, pero en esto se ha equivocado mucho. Cuidadito con estas cosas, porque entonces se juega en el campo que los independentistas quieren jugar. Pediría que no alimentemos su argumentario de forma artificial», ha añadido. «Puigdemont está todo el día dando entrevistas, haciendo campaña, saliendo en medios. Es verdad que ven limitadas sus capacidades, pero no se les ha descabezado».