El Grupo Planeta ha decidido trasladar su sede social de Barcelona a Madrid «si se produce una declaración unilateral de independencia en Cataluña», a 24 horas de la comparecencia del presidente catalán, Carles Puigdemont, con una esa declaración sobre la mesa.
El principal grupo editorial y audiovisual español ha explicado a través de un comunicado de prensa que la decisión de trasladar su sede social ha sido adoptada por su Consejo de Administración «ante la inseguridad jurídica que se produciría».
El Consejo de Administración del Grupo Planeta ha valorado asimismo en su decisión la protección de «los intereses de sus accionistas, empleados y del proyecto empresarial».
Planeta ha asegurado que «el traslado del domicilio social no comporta movimiento de empleados, ya que el grupo cuenta con sedes operativas en diversas ciudades de España».
José Manuel Lara Bosch dijo en 2012 que si en Cataluña se declaraba la independencia, el grupo Planeta abandonaría esa comunidad para «irse» a «Madrid, Cuenca o Zaragoza» y en 2015, ya fallecido el editor, su hijo José Manuel y el actual presidente, José Creuheras, manifestaron su «voluntad inequívoca» de respetar sus deseos.
«Mi padre se significó de una forma muy clara hace ya mucho tiempo. Yo no soy quién para rectificar lo que dijo y pensamos exactamente lo mismo que él dijo en 2012», respondió José Manuel Lara García-Piriz, a una pregunta de los periodistas en la rueda de prensa de presentación de la 64 edición del Premio Planeta.
Lara Bosch, una de las mayores fortunas de España, llegó a decir que su grupo editorial se tendría que ir de Cataluña si ésta se independizaba y poco después concretó sus palabras y afirmó que la matriz que controla el grupo permanecería en Barcelona ante una hipotética Cataluña independiente, pero que las editoriales castellanas se mudarían a otras ciudades de España.
«Yo no me iré, viviré aquí y las editoriales catalanas del grupo tampoco abandonarán Barcelona, pero a lo mejor tendré que trabajar de lunes a jueves en otro lugar», aseguró en 2012, durante la tradicional conferencia de prensa de la víspera del Premio Planeta.
Un año después concretó en una entrevista en Canal Sur Televisión que, en caso de que Cataluña se independizara, llevaría la sede de sus empresas a Sevilla, donde pensaba que lo tendría más fácil al dirigir una «industria cultural basada en el idioma» español, mientras en Cataluña el idioma oficial sería el catalán.
El presidente de la Cámara de Comercio de Sevilla, Francisco Herrero, había hecho una petición a través de un escrito remitido al presidente del Grupo Planeta, José Creuheras, en el que tras mostrarle su apoyo ante los acontecimientos que se viven en Cataluña, le trasladaba que sería de una «gran relevancia para Sevilla que fuera designada como sede de su grupo empresarial».