Margarita Toledo, madre del cabo Francisco Javier Soria fallecido el 28 de enero en Líbano por fuego israelí, ha exigido hoy «respuestas» y una investigación judicial que dé a conocer la «verdad» de los hechos, que actualmente se encuentra en la Audiencia Nacional tras inhibirse del caso la justicia militar.
Margarita, en rueda de prensa junto al secretario general de la Asociación Unificada de Militares Españoles (AUME), Mariano Casado, ha lamentado que casi cinco meses después de la muerte de su hijo «no sabemos absolutamente nada, ni tenemos noticias de nada», ni por parte del Ministerio de Defensa, ni de la ONU, ni de Israel ni de Líbano.
Tras afirmar que de la muerte de su hijo se enteró por la prensa y que hasta el día de hoy ninguna autoridad se ha puesto en contacto con ella y su marido, Margarita ha pedido explicaciones, porque «a mi hijo lo han matado, ha sido asesinado. No ha sido un accidente».
Por ello, ha agregado, «alguien tendrá que pagar. Habrá un responsable», y «como madre iré donde tenga que ir para defender a mi hijo», ha puntualizado.
En su opinión, el Gobierno español y el Ministerio de Defensa no han hecho lo que deberían de hacer, que es defender a los soldados que mandan a misiones humanitarias como la de Líbano, y ha pedido que el ministro de Defensa «se vaya cuanto antes».
Ha cuestionado que el ataque israelí fuese un «error» como señalan los informes de Israel y la ONU al preguntarse cómo es posible que durante dos horas fuera bombardeada la posición en la que se encontraba su hijo, en la denominada Blue Line, en la frontera entre Líbano e Israel.
Por su parte, el secretario general de AUME, asociación personada en el caso, ha denunciado que cinco meses después no se ha investigado la muerte del cabo Soria y que las diligencias abiertas han sido mínimas, sin entrar en los autores ni detalles del ataque.
El caso se encuentra en la Audiencia Nacional, que deberá valorar el auto del Juzgado Togado Militar número 11 del pasado 10 de junio por el que acuerda inhibirse y decidir la asignación del juzgado correspondiente para seguir con el proceso.
Casado, tras advertir «dificultades para que el caso siga su marcha procesar ordinaria» y la ausencia de la Abogacía del Estado en el proceso, ha declarado que este asunto «no puede cerrarse con una cuestión meramente económica».
«La muerte de un militar no puede quedar impune. Tiene que conocerse la verdad», ha recalcado Casado, quien ha recordado que el cabo Soria murió cumpliendo con su trabajo, por su país y su bandera. Se merece un trato justo y digno».
Israel ha reconocido la autoría de la muerte del cabo Soria y se ha comprometido a indemnizar a su familia, según explicó el ministro de Defensa, Pedro Morenés, en una comparecencia en el Congreso el pasado 14 de abril.
El cabo murió a causa de un impacto de un proyectil de artillería israelí de 155 milímetros, lanzado a 16 kilómetros por una batería, que cometió «varios errores» y fue realizado «sin ningún tipo de intencionalidad» contra los cascos azules.