El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha mejorado en cuatro décimas su previsión de crecimiento de la economía española para 2014 y en tres la de 2015, pero incide en que la recuperación tanto de España como del resto de países de la periferia será «modesta», según recoge en la actualización de enero de su informe 'Perspectivas Económicas Mundiales'.
En concreto, el FMI prevé que el Producto Interior Bruto (PIB) de España suba un 0,6% este año, frente al 0,2% que recogían sus previsiones de octubre, dejando así atrás la caída del 1,2% que calcula para 2013. Por su parte, en 2015 la economía subirá un 0,8%, frente al 0,5% que esperaba hace tres meses.
La revisión al alza de la previsión para 2014 de España es la segunda mayor de todas las realizadas por el FMI en enero, cuando sólo actualiza las de las principales economías mundiales. Así, se ve superada por la mejora de seis décimas de la de Reino Unido, desde 1,8% al 2,4%. Para 2015, es la mayor revisión al alza de todas las publicadas.
La previsión del FMI para 2014 es una décima superior a la de otras instituciones internacionales como la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Comisión Europea (CE), pero está aún ligeramente por debajo del 0,7% que estima el Gobierno español.
Sin embargo, para 2015 la institución dirigida por Christine Lagarde es bastante más negativa sobre el potencial de crecimiento de la economía española, ya que es inferior al 1% de la OCDE, al 1,2% del Ejecutivo de Mariano Rajoy y, sobre todo, del 1,7% de Bruselas.
Recuperación desigual en la eurozona
Para el conjunto de la eurozona, el FMI ha mejorado en una décima sus previsiones, hasta el 1% en 2014 y el 1,4% en 2015, y considera que la unión monetaria está saliendo «de la recesión hacia la recuperación», aunque advierte de que esto se está produciendo de una forma desigual.
En este sentido, apunta que la economía en general será «más modesta» en los países que se han enfrentado a tensiones en los mercados (Grecia, España, Chipre, Italia y Portugal), pese a algunas revisiones al alza «como la de España».
«La elevada deuda, tanto pública como privada, y la fragmentación financiera frenarán la demanda doméstica, mientras que las exportaciones deberían contribuir más al crecimiento», advierte.
Entre los principales países de la eurozona, el FMI mejora en dos décimas la previsión de Alemania para 2014, hasta el 1,6%, y en una la de 2015, hasta el 1,4%. En el caso de Francia las mantiene sin cambios respecto a octubre, en el 0,9% y el 1,5%, respectivamente, mientras que en el de Italia reduce en una décima la de este año, al 0,6%, pero sube en una la del próximo, hasta el 1,1%.
Repunte de la economía global
Respecto a la economía mundial, el FMI destaca que la actividad global se fortaleció en la segunda mitad de 2013, con un crecimiento incluso aún mayor de lo que esperaba en octubre. En concreto, el aumento del PIB mundial pasará del 3% de 2013 al 3,7% en 2014, una décima más de lo que recogía el informe de octubre. Para 2015 mantiene sin cambios su previsión del 3,9%.
«La actividad está previsto que mejore aún más en 2014 y 2015, debido principalmente a la recuperación de las economías avanzadas», remarca el Fondo, que incide en que la revisión a la baja de las previsiones de algunos países subraya las «continuadas fragilidades» y que persisten los riesgos a la baja.
Así, las economías avanzadas crecerán un 2,2% este año, dos décimas más de lo que preveía en octubre, y un 2,3% el que próximo, dos décimas menos. Para los países emergentes deja sin cambios su previsión del 5,1% para 2014 y mejora en una décima la de 2015, al 5,4%.
Entre las principales economías, mejora en dos décimas su previsión de Estados Unidos para 2014, hasta el 2,8%, pero reduce en cuatro la de 2015, hasta el 3%, por un ajuste fiscal mayor del previsto. En el caso de Japón mejora desde el 1,3% al 1,7% la de este año, pero empeora desde el 1,2% al 1% la del próximo.
Por su parte, la economía China crecerá un 7,5% en 2014 y un 7,3% en 2015, tres y dos décimas más, respectivamente, en comparación con los datos de octubre. La mayor revisión a la baja afecta a la economía rusa, que crecerá un 2% este año y un 2,5% el próximo, un punto porcentual menos en ambos casos.