El expresidente José María Aznar ha afirmado que si él estuviese al frente del Gobierno actuaría en Catalunya aplicando la ley «con todas sus consecuencias», concretamente la que él aprobó para penar con cinco años de cárcel la convocatoria de un referéndum ilegal (en el caso catalán a Artur Mas). Pero la ley fue derogada por el Ejecutivo socialista y «no ha sido restablecida» por el actual.
En una entrevista en Onda Cero, Aznar ha defendido que, frente a quienes le culpan de haber incentivado el independentismo, «ahora se demuestra» que su Gobierno tenía razón en defender «una política nacional muy vigorosa y muy fuerte» y «que el Estado esté muy sólido y cohesionado» para evitar lo que ahora se vive en Catalunya.
«Poner cotos a los que quieren desbordar la legalidad, romper el país, cuestionan la Constitución, es muy importante, y ahora se demuestra que algunos teníamos alguna razón por defender algunas posiciones entonces», ha dicho.
Ironía
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha ironizado este martes al considerar que el lenguaje del expresidente del Gobierno central y del PP José María Aznar es «anticuado, pasado de moda y desfasado».
«Me gustaría poner un punto de ironía. En el debate político hay mucho lenguaje antiguo, desfasado y pasado de moda de aquellos que quieren leyes para encarcelar a presidentes elegidos democráticamente», ha dicho
El consejero de Presidencia y portavoz del Gobierno, Francesc Homs, ha instado al Gobierno central a que «repruebe» las declaraciones del expresidente Aznar porque, ha dicho, son de «otra época, de otro régimen».
El portavoz del Grupo Popular, Alfonso Alonso, no ha querido comentar en el Congreso la reclamación de Aznar y ha asegurado que el supuesto de referéndum ilegal no se va a producir.