El secretario general de Juventudes Socialistas (JSE), Nino Torre, cree que la Monarquía es una institución «vieja y obsoleta» y considera que en la España actual hay «un caldo de cultivo» suficiente como para plantear el debate sobre la III República.
Cuando se cumple el 82 aniversario de la proclamación de la II República, Torre repasa en una entrevista con Efe los últimos acontecimientos de la actualidad política, incluida la figura de la Corona.
Torre declina pronunciarse sobre si el Rey Juan Carlos debería abdicar o no en favor de su hijo, el Príncipe Felipe, y argumenta que esa es una cuestión, en todo caso, de la que hablan quienes son favorables a la continuidad de la Monarquía.
Pero él prefiere la República y juzga que el país vive el «momento idóneo» para abordar ese debate, después de «escándalos» como «la caza de elefantes del rey en Botsuana, el disparo del nieto Froilán, la imputación de la infanta Cristina o las actividades de Iñaki Urdangarin en el Instituto Nóos».
En su opinión, los socialistas no pueden eludir esta cuestión en su conferencia política de octubre, que tienen que aprovechar -dice- para plantear un avance hacia una República federal.
Aunque insiste en agradecer el papel del Rey Juan Carlos durante la transición y el golpe de Estado de 1981 y su contribución a la hora de estabilizar la democracia, Torre precisa que ese sentimiento de gratitud es más notorio en los dirigentes del PSOE que vivieron aquella época que en las nuevas generaciones.
Juventudes Socialistas ha iniciado, por otra parte, una campaña para pedir que se revisen los acuerdos con la Santa Sede y para que la Iglesia deje de recibir financiación pública.
«Ni supone un ataque a la Iglesia, ni a los católicos, ni a las costumbres religiosas», aclara su secretario general, convencido de que organizaciones como Cáritas hacen «una labor encomiable».
Después de apuntar que el espíritu de los acuerdos de 1976 y 1979 era ir hacia la suficiencia financiera de la Iglesia, Torre aboga por retirar los 6.500 millones que, según sus cálculos, recibe esta institución al año y dedicarlos a servicios sociales, con lo que se podrían evitar los recortes.
Recuerda el líder de los jóvenes socialistas que el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, se comprometió al ser elegido en promover la revisión de esos acuerdos, algo que ayer reiteró en Badajoz, durante una jornada monográfica dedicada a fiscalidad.
JSE insistirá en esta propuesta en la conferencia política del PSOE de octubre e incluso la organización juvenil está dispuesta a iniciar una campaña de recogida de firmas para impulsar una iniciativa legislativa popular para retirar el dinero público a la Iglesia.
Sobre los escraches a políticos, Torre admite que la situación es «muy compleja».
«Poniéndose en la piel de las familias a las que les llega una notificación del juzgado -ilustra-, que saben que las van a desahuciar en semanas o meses y que van a seguir debiendo dinero al banco, comprendo que recurran a cualquier actuación con tal de convencer a los que tienen capacidad de cambiar esto, que son los políticos"
A renglón seguido, rechaza tajantemente que los escraches sean con violencia o con intimidación.
La respuesta de las autoridades, según su criterio, tiene que ser proporcional: «No es lo mismo que haya mil personas tocando al timbre de la casa de un diputado o que haya un grupo reducido informando sobre la dación en pago».
Nino Torre habla además de la situación interna del PSOE y, aunque no opina sobre si sería necesario adelantar el calendario de primarias para elegir al candidato a la Moncloa -previstas para la segunda mitad de 2014-, sí incide en la importancia de que «un partido se regenere».
«Tiene que haber una combinación de experiencia, renovación y juventud», receta.
Ahora bien, también es imprescindible, a su juicio, armar un proyecto político sólido para las elecciones de 2015 que ofrezca alternativas en empleo, desahucios o servicios sociales, y poner en marcha las estructuras necesarias para conectar mejor con la ciudadanía.