El Consejo de Ministros aprobó ayer un real decreto ley de medidas urgentes para paliar los daños producidos por los incendios forestales y otras catástrofes naturales que contempla la posibilidad de requerir los servicios de quienes estén percibiendo una prestación de desempleo.
Hasta la fecha, la superficie arrasada por el fuego en España alcanza las 181.000 hectáreas, lo que convierte 2012 en uno de los años «más duros». «Ahora toca, con urgencia, restaurar los daños que se han causado y ayudar a que estas zonas vuelvan a la normalidad», subrayó ayer la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría.
Reconstrucción y limpieza
Este real decreto contempla la posibilidad de que las Administraciones Públicas y las entidades sin ánimo de lucro puedan solicitar la colaboración de quienes estén cobrando alguna prestación de desempleo para trabajar en la reconstrucción y limpieza de las zonas afectadas.
El real decreto ley contempla, además, ayudas para daños personales, materiales y en los enseres, así como para las personas físicas o jurídicas que hayan participado en las operaciones de extinción de incendios.
También recoge ayudas para el alquiler, la reparación, rehabilitación y la reconstrucción de viviendas, de la que podrán beneficiarse los dueños, interinos o titulares de cualquier contrato en vigor y las comunidades de propietarios por daños en bienes comunes.
Habrá subvenciones por daños en infraestructuras municipales y en la red viaria de diputaciones y cabildos, a las que les podrán conceder hasta un 50% de su coste.
La nueva norma establece medidas de naturaleza fiscal, como la exención del IBI para los inmuebles gravemente dañados y reducciones en impuestos de actividades económicas correspondientes al año 2012.