El líder del PP, Mariano Rajoy, acusó ayer a la Fiscalía de actuar con «saña» al recurrir el archivo de la parte del 'Caso Gürtel' que investigaba el Tribunal Superior de Justicia de Valencia al estimar que el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, cometió un delito de cohecho impropio. Rajoy, quien se expresó así en una entrevista en Punto Radio después de conocer esa decisión de la Fiscalía, ha considerado que esa forma de actuar se está reproduciendo en todos los asuntos que afectan a su partido.
Destacó que decisiones de ese tipo contrasten con el hecho de que «mire para otro lado» en asuntos que afectan, por ejemplo, al vicepresidente Manuel Chaves por la subvención concedida por la Junta de Andalucía a la empresa en la que trabaja su hija. Rajoy lamentó que «todos los españoles no sean iguales ante la ley» a juzgar por la actuación del Fiscal General del Estado.
La Fiscalía, efectivamente, recurrió ayer el archivo de la parte del 'caso Gürtel' que investigaba el Tribunal Superior de Justicia de Valencia al estimar que Camps cometió un delito de cohecho impropio al aceptar regalos aunque éstos no tuvieran contrapartida alguna. En el escrito presentado al Supremo, la Fiscalía dice también que el archivo el pasado 3 de agosto de la causa fue «prematuro», ya que la fase de investigación seguía abierta y, al tratarse de un sobreseimiento libre -es decir, definitivo- y no provisional, es imposible reabrir la causa «aun cuando aparecieran nuevos datos referidos a los hechos del procedimiento».
Confianza
Mientras, Rajoy mantiene su plena confianza en Camps y en su capacidad de actuar, «sin plazos y sin exigencia de dimisiones», tras las últimas revelaciones del 'Caso Gürtel' que apuntan a una supuesta financiación irregular del PP valenciano. Ese apoyo se lo trasladó personalmente el miércoles a Camps durante el almuerzo que ambos mantuvieron durante varias horas en el Parador de Alcorcón (Cuenca) para analizar la situación creada en el PP valenciano a raíz del informe de la Brigada Policial de Blanqueo.
Las fuentes consultadas niegan que haya habido algún tipo de distanciamiento entre el presidente nacional del PP y el presidente de la Generalitat por las últimas informaciones del caso y, de hecho, destacan que la relación entre ambos ha sido y sigue siendo «magnífica».
A la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ni la avisaron de la reunión secreta entre el presidente del partido, Mariano Rajoy y el líder de la Comunidad Valenciana, Francisco Camps, celebrada el miércoles en el Parador de Alarcón. En ese encuentro, el jefe del PP ni siquiera exigió a Camps la misma «contundencia» que De Cospedal a la hora de reclamar «medidas contundentes» al PP valenciano. A pesar de todo ello, la 'número 2' del partido asegura no sentirse desautorizada. Se enteró de la reunión secreta entre Rajoy y Camps a través de los medios de comunicación. A pesar de ello, aseguró ayer no sentirse desautorizada, «más bien, todo lo contrario», remarcó la supuesta mano derecha de Rajoy. La secretaria general del PP manifestó en público la necesidad de adoptar «medidas contundentes» para atajar el 'caso Gürtel'.
EFE-VALENCIA
El president de la Generalitat, Francisco Camps, eludió ayer comentar si en el encuentro mantenido el miércoles con Mariano Rajoy hablaron de dimisiones en el PP valenciano y dijo que a quien pediría que dimitiera es al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.
Camps fue preguntado por los periodistas sobre si él y el presidente del PP, Mariano Rajoy, hablaron, durante el almuerzo que mantuvieron en Alarcón (Cuenca), de dimisiones en el PP de la Comunitat Valenciana tras las investigaciones sobre presunta financiación ilegal del partido.
El president de la Generalitat se limitó a contestar a la pregunta que él a quien le pediría la dimisión es «al presidente José Luis Rodríguez Zapatero», porque es necesario que convoque elecciones generales, ya que España necesita «un cambio de rumbo urgente».
En el encuentro del miércoles, «estuvimos hablando del presente y del futuro de España porque estoy convencido de que, como tantas veces, estaba hablando con el futuro presidente del Gobierno de España». Según Camps, Rajoy y él también conversaron sobre «las personas que no tienen trabajo, las familias que lo están pasando mal y también hablamos de que no se pueden subir los impuestos para generar riqueza».