El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ordenó ayer el ingreso en prisión de los dos supuestos dirigentes de Batasuna Asier Imaz y Gorka Díaz, quien se entregó por la mañana, a los que acusa de un delito de integración en banda armada.
Con el ingreso en prisión de Imaz y Díaz son ya 19 los miembros de la Mesa Nacional de la ilegalizada Batasuna que permanecen encarcelados, después de que el magistrado enviara a la cárcel a 17 miembros de la formación abertzale que fueron detenidos hace diez días cuando participaban en una reunión en la que, al parecer, se reorganizaba la estructura de la formación para seguir dando cobertura a ETA.
Ambos han comparecido ante Garzón por espacio de un cuarto de hora cada uno y se han negado a contestar a las preguntas que les ha formulado el juez y la fiscal Dolores Delgado, que pidió para los dos prisión incondicional y comunicada.
Garzón explica en el auto de prisión que los dos estuvieron presentes en la citada reunión, aunque en ese momento eludieron su detención, en la que la Policía actuó para «hacer cesar la actividad delictiva» puesto que Batasuna es una organización cuya actividad él suspendió el 26 de agosto de 2002 y que el Tribunal Supremo declaró ilegal el 27 de marzo de 2003.
También detalla otras reuniones y actos de Batasuna en los que ambos han participado entre 2006 y 2007 para argumentar la relación de Imaz y Díaz con la organización abertzale, aunque añade que en aquellas ocasiones no se detuvo a nadie porque o bien se tuvo conocimiento de su celebración posteriormente o por su escaso número de asistentes o por «falta de evidencias suficientes» para actuar.
Asimismo, el juez ha anticipado que estudiará emprender nuevas acciones contra otros líderes en relación con el comunicado de la Mesa Nacional publicado en el diario «Gara» tras la detención de la cúpula de la formación.
El magistrado avanza su intención de actuar contra otros miembros de Batasuna tanto por este comunicado como por las «manifestaciones de otros líderes» de dicha organización, como Pernando Barrena y Jone Goiricelaia.
En el comunicado, la Mesa Nacional de Batasuna acusa al PSOE de «cerrar todos los caminos a la independencia», en referencia a las detenciones.
Garzón compara este manifiesto con los comunicados de ETA de junio y septiembre de 2007 en los que la banda armada señala que deja sin vigor el alto el fuego.