Dos militares de las tropas españolas destacadas en Kosovo han fallecido y otros dos han resultado heridos, al estrellarse su vehículo contra una gasolinera cuando intentaba evitar un choque frontal con otro coche que había invadido su carril, en las proximidades de la base española en Istok.
Los militares fallecidos son dos cabos del Ejército de Tierra: Francisco Javier Roldán Naranjo, de 34 años y que llevaba 12 años en el Ejército, y Antonio Jesús Bonilla Ríos, de 24 años y que iba a cumplir cinco años en las Fuerzas Armadas el próximo mes de noviembre.
El suceso ocurrió elmartes por la noche hacia las 22 horas cuando el vehículo «Aníbal» en el que viajaban volcó e impactó contra una gasolinera al intentar evitar un choque frontal contra un coche civil que había invadido su carril, según el primer informe sobre el accidente realizado por el Estado Mayor de la Defensa.
En ese accidente han resultado heridos los cabos primeros Juan Sánchez Bernal y Héctor David Trujillo Casanovas, que están fuera de peligro tras ser atendidos en un primer momento en un hospital de la ciudad de Prizren con lesiones de «carácter leve».
Un avión del Ejército del Aire voló ayer a Kosovo para repatriar los dos cadáveres y a los dos soldados heridos. El fallecimiento de los dos cabos eleva a diez el número de militares españoles muertos en Kosovo desde que España participa en la misión de paz liderada por la OTAN en 1999.
Responsables del Gobierno, PSOE, PP, y los Gobiernos de Andalucía y Canarias, así como otras instituciones, han lamentado el accidente y expresado su solidaridad y dolor por el suceso.
El vicepresidente segundo del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, ha recordado que la labor que realizan las Fuerzas Armadas «vale la pena» y ha considerado que el accidente «es una desgracia que se añade a los sacrificios» del Ejército
Maite, hermana de Francisco Javier Roldán, ha destacado que él estaba donde quería, pues su deseo era participar en misiones de paz.