El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, realizó ayer un viaje sorpresa a Afganistán para visitar a las tropas españolas allí desplegadas.Zapatero, que rindió homenaje a los 17 militares que murieron en ese país en el mes de agosto, expresó a los soldados «el orgullo que los españoles sienten por la labor que realizan».
En su homenaje a los soldados muertos en al estrellarse el helicóptero en el que viajaban, Rodríguez Zapatero señaló que «cumplían con dignidad su tarea, y sus familias dieron y dan cada día un ejemplo de civismo que sirve para todos los españoles, quienes les tendrán siempre en la memoria». Un pueblo, añadió, «es digno siempre que recuerda y lleva en el corazón a aquellos que han dado la vida por servirle».
Zapatero dijo sentirse «emocionado por el trabajo de los militares españoles», «que sirven a un Ejército que pretende ser estandarte de la paz en el mundo».
El presidente del Gobierno, a quien acompañaban los ministros Bono y Moratinos, se desplazó a la zona del accidente en helicóptero. Junto a las autoridades afganas, plantaron 17 cipreses en honor de las víctimas del siniestro y una compañía entonó el himno «La muerte no es el final».