La manifestación silenciosa convocada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo para pedir el cumplimiento íntegro de las penas para los etarras se tornó en una concentración en la que se profirieron gritos contra el Gobierno, el PSOE y contra la cadena SER.
El ministro de Defensa, José Bono, se vio obligado a abandonar la marcha ante los insultos e incluso un intento de agresión. El presidente de la AVT, Francisco José Alcaraz, manifestó su «total condena» ante esta actitud hacia el titular de Defensa y la cadena de radio porque «responden a cualquier interés pero no al de las víctimas».
Pasadas las cinco de la tarde arrancaba la manifestación -a la que asistieron 35.000 personas- encabezada por las víctimas con una pancarta en la que se leía 'Memoria, dignidad y justicia con las víctimas del terrorismo'. Desde el primer momento se escucharon gritos como «¿Dónde está Zapatero? y contra Peces-Barba, ausentes de la concentración, así como elogios al PP. Se oyeron consignas como «una sola España», «¿ZP dónde está?», «España unida jamás será vencida» o «El DNI no engaña, Euskadi es España», así como peticiones de dimisión de Peces-Barba.Posteriormente, cuando más de media hora después se formó la segunda cabecera, la de los políticos, que portaban el lema «Comprometidos con las víctimas del terrorismo», Jordi Sevilla, y el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, tuvieron que escuchar con un gran vocerío «¿Dónde estás Zapatero?». El ambiente se caldeó de tal manera que el ministro de Defensa, José Bono, se vio obligado a abandonar la marcha ante los insultos e incluso sufrir un intento de agresión. El titular de Defensa manifestó su «tristeza» por haberse encontrado con gente «que no ama la libertad. Desde la época de la Dictadura» no había asistido a una manifestación en la que sintiera la violencia tan cerca, dijo.