El PP volvió ayer a rechazar la admisión a trámite de las peticiones de comparecencia, por parte de los partidos de la oposición, para que el presidente del Gobierno, José María Aznar, explique en el Parlamento en qué informes se basó para sostener que el régimen de Sadam Husein podeía armas de destrucción masiva. Al igual que la pasada semana, los populares se escudaron en que las Cortes están disueltas, por lo que no cabe celebrar comparecencias.
La petición había sido formulada por el PSOE, IU y el Grupo Mixto, exigiendo que el jefe del Ejecutivo informara de los «datos e informes de los que dijo disponer en su día sobre el hecho de que el régimen de Husein disponía de armas de destrucción masiva, suponía un peligro cierto e inmediato para la comunidad internacional» y tenía conexión con grupos terroristas.
Según la vicepresidenta socialista de la Mesa, Amparo Rubiales, el PP ha mantenido una «interpretación restrictiva» de la legislación para concluir que, en esta fase de Cortes disueltas, no caben comparecencias. «Es una aberración jurídica y, mucho más, política. Tendremos que ir a EE UU para enterarnos», dijo.Rubiales aconsejó a la oposición recurrir en amparo ante el Tribunal Constitucional para resolver esa situación de ausencia de control parlamentario y recordó que en esta legislatura ya ha habido dos sentencias condenando la negativa a debatir comparecencias.