En un foro hispano-alemán celebrado en la Cancillería y una posterior conferencia de prensa conjunta, Schröder reafirmó su apoyo a la propuesta de reparto de poder consagrada en el proyecto de Constitución Europea, en abierta discrepancia con Aznar, que defendió la necesidad de aplicar el modelo pactado en el Consejo de Niza porque es el único que ha concitado consenso. El canciller alemán, que examinó la noche del miércoles con Aznar sus diferentes puntos de vista en una cena de trabajo, insistió en la conveniencia de aceptar el sistema de voto en el Consejo de la UE propuesto en el proyecto constitucional y advirtió a quienes quieran «reabrir» la discusión de que deberán garantizar el logro de «un consenso mejor». Por el contrario, Aznar recordó que el único consenso existente entre los 25 Estados de la futura UE es el que concitó la fórmula de Niza, por lo que deberían ser los partidarios de la modificación de ese consenso quienes dieran explicaciones sobre sus motivos.
No obstante, Schröder se mostró convencido de que habrá una aproximación de posiciones durante los debates de la Conferencia Intergubernamental encargada de redactar el texto definitivo con el fin de lograr un consenso «antes de Navidad», objetivo que Aznar comparte, con la seguridad de que las discrepancias se tratarán «seria y lealmente». Aznar insistió en asegurar que este punto es el único en el que España y Alemania defienden «una visión distinta» y puso el énfasis en demostrar que las relaciones hispano-alemanas son mejores de lo que parecen.
«Aunque muchos de ustedes no se lo crean», la entrevista fue «una buena reunión de antiguos amigos, que a veces discuten y no tienen las mismas opiniones», pero siempre «en un ambiente de cordialidad personal», dijo Aznar. El jefe del Ejecutivo español reafirmó la necesidad de «respetar las reglas» impuestas en el Pacto de Estabilidad y deseó en este contexto una «rápida recuperación» de la economía alemana por el bien de toda la UE, por lo que expresó su apoyo al conjunto de reformas impulsadas por el canciller Schröder.