El gobernador del Banco de España, Jaime Caruana, aseguró ayer que los hechos que han dado lugar al expediente disciplinario abierto al BBVA «carecen de impacto material» sobre la solvencia y la rentabilidad del grupo y son «aislados y ajenos por completo» a la evolución del sistema bancario español. Así lo indicó en el Congreso de los Diputados donde resumió las actuaciones que han dado lugar a la apertura del expediente disciplinario al Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) y a dieciséis de sus administradores y altos directivos.
En sus primeras declaraciones públicas sobre el caso, ratificó que la primera información que tuvo relativa a los hechos fue el 19 de enero del 2001 "cuando los presidentes del BBVA le comunicaron unos resultados extraordinarios de 37.343 millones de pesetas ó 224'4 millones de euros en 2000" y que no se lo comunicó al ministro de Economía, Rodrigo Rato, hasta el 18 de octubre de ese año.
El BBVA constituye una referencia internacional y cuenta con unos elevados recursos propios y un ratio de solvencia del 12'6 por ciento, precisó. Tras resumir los hechos, Caruana destacó la «dificultad» para detectar el entramado financiero del BBVA en el exterior, debido a la antigüedad de los hechos, su carácter opaco y su instrumentación. Explicó que la información que el BBVA facilitó se consideró «insuficiente», por lo que la Comisión Ejecutiva del Banco de España elevó una propuesta de requerimiento a la entidad para que remitiera documentación sobre trece puntos concretos del citado informe, momento en el que Caruana puso el caso en conocimiento de Rato.
Tras la insistencia de los grupos parlamentarios, Caruana explicó que informó a Rato el 18 de octubre, cuando la inspección del Banco de España determinó que la información facilitada por el BBVA era insuficiente y solicitó a la Comisión Ejecutiva el requerimiento de más información. Añadió que, cuando se lo comunicó al ministro, «no le di detalles, ni documentos, ni expedientes» y que «sólo le informé de lo que se estaba haciendo». Aseveró que el Banco de España «actúo con la diligencia habitual y el rigor de siempre» si bien incidió en las «dificultades» que para «detectar algunas informaciones» a pesar, precisó, del «cierto grado de colaboración» que ha existido con el BBVA.
De otra parte, el BBVA obtuvo en el primer trimestre del año un beneficio atribuido de 587 millones de euros, un 6 por ciento superior al del mismo periodo del año anterior, según fuentes de la entidad. Según fuentes del banco, de no haber sido por el «efecto Argentina» país donde la entidad perdió cuatro millones de euros entre enero y marzo los beneficios netos atribuidos del grupo hubieran crecido un 18 por ciento.