El 38 Congreso Confederal del sindicato UGT que comenzó ayer en Madrid tuvo un claro denominador común: los acercamientos y la propuesta de semana laboral de cuatro días, uno de los ejes fundamentales del Congreso Confederal. El secretario general de UGT, Cándido Méndez, destacó que la reducción a 35 horas semanales es uno de los objetivos fundamentales del sindicato, al que se asocia ahora otro más ambicioso: la jornada semanal de cuatro días.
Esta reducción, «que no está planteada con afán de polémica», tendría que hacerse sin reducción de salario para hacerla compatible con la convergencia salarial con Europa. Para el secretario general de CC OO, José María Fidalgo la jornada laboral de cuatro días semanales propuesta por UGT se debe vincular a la negociación colectiva. «Me encantaría trabajar tan poco. No sé si va a proponer en alguna negociación, pero creo que eso se debe proponer en la negociación colectiva. No he oído que exista en ningún convenio», señaló.
Esta reducción de jornada es vista por el ministro de Trabajo, Juan Carlos Aparicio, como «inadecuada», por lo que remitió a la autonomía de las partes de establecer jornadas laborales de cuatro días semanales a través de la negociación colectiva.
En un intento de aproximar posiciones, el secretario general socialista, José Luis Rodríguez Zapatero, alabó sin cortapisas al sindicato de Cándido Méndez y dijo que ambos tienen raíces y valores comunes «y ganas de cambiar esto». Pero este no fue el único acercamiento que se produjo, el secretario general de CC OO, José María Fidalgo también hizo un llamamiento a la unidad de acción sindical y a la colaboración entre ambas centrales.