Ibai y Miguel Ayensa y Francisco Ruiz, los etarras integrantes del nuevo 'comando Nafarroa' que el jueves desarticuló la Guardia Civil en Pamplona han confesado su autoría en cuatro acciones. Dos de ellas acabaron con sendas vidas, las del portavoz de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona, Tomás Caballero, y la del militar Francisco Casanova Vicente. Tras las detenciones, el ministro del Interior, Mariano Rajoy, aseguró que se trataba de un comando nuevo. Sin embargo, los detenidos han confesado su participación en atentados incluso anteriores a la tregua.
Así, se han confesado autores del asesinato del entonces portavoz de UPN en el Ayuntamiento de Pamplona, Tomás Caballero. Los terroristas perpetraron el atentado el 7 de mayo de 1998, muy cerca del domicilio del asesinado. El concejal murió tras recibir dos disparos, uno que le atravesó la cabeza y el otro que se alojó en la mandíbula. Tras ese asesinato, ETA mató a otras dos personas, el subteniente jubilado de la Guardia Civil Alfonso Parada y el concejal del PP en Rentería Manuel Zamarreño, antes de decretar la tregua el 16 de septiembre. El comando desarticulado, al menos dos de sus integrantes, también se declaró autor del asesinato del subteniente del Ejército Francisco Casanova, perpetrado el 10 de agosto de 2000.
De otra parte, el Consejo de Ministros solicitó ayer a Francia la extradición del etarra José Luis Urrusolo Sistiaga, alias «Joseba», en relación con la colocación de dos coches bomba en Palma, así como de otros cuatro artefactos entre julio y octubre de 1991. Como miembro del «comando Ekaitz», Urrusolo se trasladó en 1991 a Palma, donde el 30 de julio estalló un automóvil junto a las viviendas militares de Porta des Camp, causando heridas a una persona y daños a la fachada.
El mismo día explotaron otros cuatro artefactos junto a una vivienda cercana a la Plaza de Toros, en cuya colocación participó presuntamente también Urrusolo, que causaron heridas a una persona y daños en toda la fachada. Tres meses después, el 30 de octubre del citado año, fue descubierto y desactivado en la zona de El Arenal un artefacto explosivo colocado en un automóvil, alquilado por Urrusulo.