Aunque la intención del Gobierno sigue siendo, según el secretario general del PP, Javier Arenas, incluir cuanto antes a Batasuna y al entorno de ETA en la lista contra terroristas de la UE, las dificultades jurídicas que puede suponer acusar al partido liderado por Arnaldo Otegi, pueden retrasar la intención de los populares. Arenas desmintió ayer que haya un pacto con el PSOE para retrasar la inclusión de la formación abertzale, mientras el líder de los socialistas, José Luis Rodríguez Zapatero, advertía que sería una equivocación. Este tema marcó la reunión que mantuvieron ayer los integrantes de la Comisión de Seguimiento del Pacto Antiterrorista. En la reunión también se abordó la situación de la lucha antiterrorista en España y Francia, y en especial, las últimas operaciones realizadas contra ETA y, por otro, se trató de dar un impulso definitivo a la Fundación de Víctimas del Terrorismo que presidirá Adolfo Suárez.
El principal problema serían las dificultades técnicas para probar la relación de Batasuna y ETA en los juzgados. Arenas reconoció que pueden existir dificultades técnicas para que Batasuna pase a ser considerada como grupo terrorista en Europa, pero matizó que esa tendrá que ser una decisión de los Quince y que el Gobierno sigue siendo partidario de que el entramado de ETA esté en la lista. Para el dirigente popular, los últimos atentados de la banda y las recientes detenciones de comandos terroristas han dado a conocer vinculaciones de Batasuna con miembros de la banda etarra. «Y si no, basta con leer a Otegi, que afirma que Batasuna nunca irá contra ETA», destacó.
Entre las posibles iniciativas que facilitarían la inclusión en la lista europea de Batasuna, está la ilegalización de la formación política. En referencia a esta posibilidad, Arenas se limitó a contestar que es un tema «claramente juidicial», aunque recordó que, en los últimos meses, los jueces han decretado la ilegalización de algunas organizaciones ligadas a ETA. El líder de los socialistas es más cauto y prefiere esperar dadas las coplejidades jurídicas para llegar a una definición de terrorismo que incluya a organizaciones como Batasuna. Zapatero cree que la «realidad jurídica» supone un obstáculo para la inserción de Batasuna en la lista de grupos que apoyan a bandas terroristas por lo que se mostró partidario de no seguir adelante, de momento.
No obstante, subrayó que el PSOE coincide con el Gobierno en que es «evidente» que existe «una realidad de vasos comunicantes entre Batasuna y ETA», aunque existe complejidad jurídica para probarlo. Además, abogó por llegar a una decisión que implique, no sólo a los firmantes del pacto antiterrorista, sino que cuente con el respaldo de la mayoría del Parlamento. Batasuna busca apoyos en el Parlamento vasco. En este sentido, Jone Goirizelaia presentó una proposición no de ley en la que insta a la Cámara vasca a que se oponga a las medidas que pretente poner en marcha la UE.