El Consejo de Gobierno de la Junta de Extremadura aprobó en la mañana de ayer el proyecto de ley del Impuesto sobre los Depósitos de las Entidades de Crédito que se aplicará a los bancos y cajas de ahorro que operan en la comunidad autónoma.
El proyecto de ley será remitido ahora a la Asamblea de Extremadura para su aprobación y el gobierno extremeño que preside Rodríguez Ibarra pretende que dicha ley entre en vigor a principios del próximo año 2002, según afirmó en la jornada de ayer el vicepresidente de la Junta, Carlos Sánchez Polo.
El nuevo impuesto a los bancos, con el que la Junta espera recaudar 6.000 millones de pesetas al año, abrió un intenso debate cuando fue anunciado el pasado mes de marzo del presente año por el ejecutivo extremeño y recibió las críticas del gobierno central de José María Aznar, que no descarta recurrirlo, y el apoyo del secretario general del partido socialista, José Luis Rodríguez Zapatero.