«Es mejor que no continúe adelante». Así de contundente se expresó Rajoy sobre las aspiraciones de autodeterminación del Gobierno vasco, antes de advertirle que, de lo contrario, el Ejecutivo central se vería obligado a tomar medidas. Según explicó, este derecho sólo se puede reconocer, según Naciones Unidas, en supuestos en los que se atenta contra las personas, «y, que yo sepa, aquí sólo atentan los señores que piden la autodeterminación».
Por eso, añadió, la autodeterminación no puede ser la prioridad del Gobierno de Ibarretxe. «La mía y la de cualquier persona normal, y más en una situación como la del País Vasco, es la prioridad absoluta de defender el derecho a la vida y las libertades frente a los que pretenden eliminarlas y establecer una dictadura», añadió. Según el titular de Interior, Ibarretxe no puede seguir diciendo que «el objetivo de ETA es el bueno», porque «entonces establecer límites medios y fines comienza a resultar complicado». Rajoy insistió en que «es mejor» que Ibarretxe «no continúe adelante con esa iniciativa, y que, por tanto, no tengamos que adoptar (desde el Gobierno) ninguna medida» al respecto.
A juicio del portavoz del PP en el Parlamento vasco, Jaime Mayor Oreja, este mensaje no va a cambiar, ya que dijo estar convencido de que el nacionalismo vasco se prepara para, «en unos meses, tener el reto de la autodeterminación encima de la mesa». Esta «ofensiva», según explicó, «se hace en Estella con ETA, y ahora se hace sin ETA, directamente desde las instituciones». La campaña del nacionalismo se dosificará «en función de la debilidad de los constitucionalistas, en función de las mezquindades que vean entre nosotros».
Por eso, pidió al PSE que no permita «fisuras en la unidad antiterrorista de ambos partidos», algo que, dijo, no ve en el secretario general de los socialistas vascos, Nicolás Redondo Terreros. Mayor Oreja también lamentó que Ibarretxe ya haya incumplido una promesa electoral. «No está haciendo de la falta de libertad su prioridad, sino que está confirmando que está en la ofensiva nacionalista en la soberanía como principal problema», dijo. Como ejemplo, el líder de los populares vascos aseguró que sólo en 67 de los casi 250 municipios del País Vasco, los concejales de su partido proceden de ese mismo pueblo.