El president del Govern balear, Francesc Antich, transmitió ayer su pésame a los familiares y amigos del policía Luis Ortiz, asesinado el pasado martes por ETA, y expresó su apoyo a las «fuerzas de seguridad, que velan para que esta mafia no siga saliéndose con la suya». Antich participó a mediodía de ayer, junto a distintos dirigentes políticos de Balears, en la concentración en repulsa de la violencia etarra convocada por el Ajuntament de Palma en la plaza de Cort.
El jefe del Ejecutivo insular subrayó la importancia de que los partidos políticos democráticos trabajen «en una postura única en contra de esta mafia». «Hoy el momento de dar importancia a toda esta gente que sin hacer mucho ruido está velando por la seguridad de los ciudadanos y ciudadanas de este país», insistió en referencia a los cuerpos de seguridad. El president del Parlament balear, Maximiliá Morales, manifestó que «los caminos de la paz y la convivencia no se buscan a través de bombas ni matando funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía; se buscan en la convivencia entre los vascos, que hoy queda reforzada con el resultado de las urnas».
Asimismo, la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antónia Munar, invitó a «reflexionar sobre lo afortunados que nosotros somos» por estar alejados del terrorismo etarra y deseó la resolución de la violencia «de una vez por todas». A la concentración celebrada ante la sede del Ajuntament de Palma también se sumaron, entre otros responsables institucionales, la consellera de Benestar Social, Fernanda Caro; el president del grupo parlamentario del PP, José María González Ortea; y los tenientes de alcalde primero y segundo del Consistorio, Carme Feliú y José María Rodríguez, respectivamente.