El ministro de Agricultura, Miguel Arias, anunció ayer, que «previsiblemente» publicará hoy una orden para paralizar todo movimiento de ganado porcino en el territorio nacional debido a la aparición de cuatro nuevos focos de peste porcina clásica (PPC) en Alpuente (Valencia) y otro posible en Talayuelas (Cuenca). El ministro, quien hizo este anuncio tras la reunión sectorial con los consejeros de Agricultura en Doñana, informó de que esta orden se publicará hoy en el Boletín Oficial del Estado y restringirá todos los movimientos de cerdos excepto aquellos que tengan como destino el matadero.
La Comunidad Valenciana ha sacrificado 2.020 cerdos de la granja de Alpuente (Valencia), aunque se ha acordado sacrificar en la zona a 13.000 cerdos más, y Castilla-La Mancha ha destruido «preventivamente» los 800 animales de la explotación porcina de Talayuelas (Cuenca). El consejero de Agricultura, Alejandro Alonso, se mostró ayer a favor de que se incrementen las medias de control para evitar la propagación de la peste, declaraciones que realizó tras la celebración de la Conferencia Sectorial de Agricultura y Pesca que se celebró ayer en Doñana (Huelva).
Alonso apuntó que la granja afectada está ubicada en una zona con gran actividad comercial con la Comunidad Valenciana (región con la que limita) y con las integradoras de Lérida, por lo que puede ser este el origen de la enfermedad, al haber estado en conexión con los focos de peste anteriormente detectados. La consejera de Agricultura de la Comunidad Valenciana, María Angels Ramón-Llin dijo que «cualquier inmovilización en este momento beneficia al ganadero, aunque no lo parezca, porque cualquier transmisión de la enfermedad le supone gravísimas pérdidas, peor que el hecho de sacrificarlos». «Nos preguntamos por qué ha llegado a la Comunidad Valenciana la enfermedad cuando siempre ha sido un ejemplo en ganadería, porque aunque ha tenido poca, ha estado muy saneada y controlada», agregó.