El proyecto de ley de reforma del Código Penal y de la Ley del Menor, que recoge las nuevas medidas legales contra ETA (especialmente contra los actos de violencia callejera y los delitos cometidos por menores), pasarán hoy su primer test parlamentario con el debate de las enmiendas de totalidad, solicitando su devolución al Gobierno, presentadas por PNV, IU y cinco partidos del Grupo Mixto.
PSOE y CiU han presentado una serie de enmiendas parciales, aunque negocian con el Gobierno un acuerdo en esta materia. No obstante, el rechazo a esta reforma del PSOE, cuyo secretario de Libertades Públicas, Juan Fernando López Aguilar, pidió ayer «serenidad» en el debate, ha chocado con las pretensiones del Gobierno. Así lo puso de manifiesto el ministro de Justicia, Angel Acebes, que defendió en los pasillos del Congreso el paquete de reformas del Código Penal y criticó al Grupo Socialista por oponerse a las mismas, en una posición que tachó de «inmovilista».
El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, señaló que espera que el Gobierno no aplique en una materia «tan sensible e importante» la «doctrina Cañete».
Por su parte, los enmendantes coinciden en que la legislación penal vigente es suficiente para combatir el terrorismo, por lo que consideran «estéril» que el Gobierno pretenda utilizar la sanción penal como elemento disuasorio. Sus críticas se centran, sobre todo, en la reforma de la Ley Penal del Menor, que entienden contraria a la protección de los derechos de los menores y a su resocialización.