Los partidos de la oposición estimaron ayer en general innecesarias las reformas legales que estudia el Gobierno para hacer frente con más dureza a la lucha contra el entorno de ETA, especialmente la violencia callejera.
Además, reprochan no haber sido consultados para acometer el estudio de dicha reforma, que prevé ampliar el delito de apología del terrorismo, reforzar las competencias de la Audiencia Nacional ante la violencia callejera y las penas contra menores por actos de «kale borroka», lo que supondría la reforma del Código Penal y de las leyes de Enjuiciamiento Criminal y del Menor.
El secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, afirmó que el proyecto del Gobierno exige «un gran consenso y una gran cautela». Rodríguez Zapatero advirtió al Gobierno de que «no es bueno para la convivencia social en general que los cambios legislativos que afectan a derechos fundamentales se cambien cada poco tiempo».
Desde el Gobierno vasco Josu Jon Imaz apuntó la necesidad de evitar controversias que afecten a la violencia y al terrorismo y «tratar de acordar posiciones en lugar de polémicas». El consejero de Justicia, Sabin Intxaurraga, dejó entrever su escepticismo ante el posible endurecimiento de la legislación antiterrorista, y aseguró que «a través de modificaciones legales, no se va a resolver el problema político».
La diputada del PNV en el Congreso Margarita Uría cuestionó la viabilidad de las reformas y calificó la iniciativa un «golpe de efecto de cara a la galería». IU reiteró su «apoyo» a «todas las medidas legales y democráticas» contra el terrorismo, aunque se inclinó por el mantenimiento de los actuales instrumentos».
Atacan la vivienda y el coche de un concejal del
PNV
Un grupo de desconocidos lanzó dos cócteles molotov contra la
vivienda y el coche del teniente de alcalde del municipio
guipuzcoano de Legazpi José Luis Zabaleta, militante del PNV. Sin
embargo, el ataque no iba dirigido contra él, sino contra su hijo,
que es ertzaina. Un desconocido asumió la autoría del ataque
«contra la represión de la Ertzaintza» por medio de una llamada a
Euskadi Irratia, en nombre del grupo 'Gazte Indarra' ('Fuerza
Joven').