La bolsa española finalizó el peor semestre desde 1994, tras acumular una caída en los seis primeros meses del año del 9'11 por ciento, por la crisis que atraviesan los mercados financieros desde el pasado marzo, explicaron fuentes del mercado.
De esta forma, la bolsa española se desmarca del resto de sus homólogas y sólo Londres se acerca a ella con una caída del 8'9%, mientras que París acumula unas plusvalías del 8'19% y Milán del 9'57%. El Ibex 35 está en la actualidad en niveles inferiores que los que registraba al ìnicio del año y las pérdidas de este selectivo índice alcanza ya el 9'1 por ciento, causadas sobre todo por los retrocesos de Telefónica "el valor con mayor peso en el Ibex" y las caídas de los títulos tecnológicos. La crisis bursátil se desató por la corrección que comenzaron a sufrir los valores tecnológicos y de telecomunicaciones, al considerar el mercado que el precio de sus acciones estaba sobrevalorado y por las constantes subidas de tipos de interés a ambos lados del Atlántico.
El pasado 6 de marzo, la bolsa española registró sus máximos históricos al alcanzar el Ibex-35 el nivel de los 12.816'80 puntos y el índice general de Madrid los 1.146'21 enteros, lo que supone que desde entonces el selectivo ha bajado un 17'4 por ciento, algo más que el general, que lo hizo un 15 por ciento.
En abril, y dado el auge de los valores tecnológicos, la bolsa española decidió crear el Nuevo Mercado como un segmento del mercado continuo, destinado exclusivamente para compañías tecnológicas o de alto potencial de crecimiento, en el que se permite fluctuar un 25 por ciento y dónde de momento se negocian sólo diez empresas.