Mallorca padece una auténtica emergencia habitacional, que está obligando a muchas personas a agudizar el ingenio para encontrar un piso en el que vivir. Es por ello que cada vez está cobrando más fuerza la modalidad de multipropiedad, que consiste en que varias familias compran un piso a medias y viven juntas. El presidente del Colegio y la Asociación de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) en Baleares, José Miguel Artieda, argumenta que «es una alternativa a la que cada vez recurren más personas ante los elevados precios de la vivienda».
En este punto, añade que principalmente se trata de familias procedentes de Latinoamérica, que han venido a trabajar a Mallorca pero no pueden pagar los elevados precios del alquiler. Es importante tener en cuenta, que están venciendo muchos contratos, ya que el contrato de arrendamiento ha finalizado al llegar al quinto año y al renovarlo incrementa de forma exponencial los precios. Artieda precisa que como la demanda es muy elevada y la oferta muy limitada, los precios se han disparado.
El presidente del Colegio y la Asociación de API Baleares señala que, en general, se trata de pisos ubicados en la periferia de Palma, en barrios como Es Rafal. Además, indica que habitualmente son inmuebles con una antigüedad de unos 40 años, de más 100 metros cuadrados y con tres o cuatro habitaciones. El precio de venta es de unos 250.000-300.000 euros.
Artieda destaca que «lo deseable sería que cada familia pudiese tener su propia casa en propiedad», pero admite que teniendo en cuenta la situación de emergencia habitacional que padece Mallorca los ciudadanos buscan soluciones que les permitan desarrollar su proyecto de vida. Esta alternativa de compra bajo la multipropiedad se da a nivel domestico, pero también a nivel de inversión privada o a través de empresas y sociedades que se dedican a ello».
No obstante, precisa que antes de realizar esta compra conjunta es necesario pactar una serie de reglas de convivencia, ya que en el día a día suele haber roces. «En muchos casos se trata de familiares o amigos que han emigrado a Mallorca para buscar trabajo, pero el precio del alquiler ha subido tanto que muchos de ellos no pueden pagarlo. Por ello, la compra de una casa a medias, pactando unas normas de convivencia, es una solución a los elevados precios de alquiler, concretamente al de habitaciones».
Inversiones en la Península
El presidente del Colegio y la Asociación de API Baleares también informa que hay mallorquines que están comprando viviendas en la Península con amigos a modo de inversión. «El norte peninsular, donde las casas son más económicas, es muy atractivo para algunos mallorquines que compran casas a medias con amigos a modo de inversión. En algunos casos las alquilan durante unos meses, en otros se turnan para ir de vacaciones, etc.», expone.
Preguntado por si la compra conjunta de inmuebles también se realiza en Mallorca como inversión, Artieda responde que no, al menos por parte de mallorquines, ya que los elevados precios hace que no sea rentable.
Hoy en día que no tener vecinos como cuenta este artículo, es gloria bendita!! No se si es mejor que te toque la lotería o tener vecinos educados..